CANCÚN.- Las mujeres que utilizan transporte público suelen estar expuestas al acoso con mirada, y en algunos casos hasta faltas de respeto por parte de los pasajeros que van en la unidad, lo cual fue posible constatar durante un recorrido en un autobús de transporte, donde se pudo apreciar que hombres no quitaban la mirada de las mujeres, en especial en glúteos y senos.
El recorrido inició en el paradero de la avenida Tulum, antes de la glorieta conocida como “El Ceviche” cerca de las 13 horas, en ese lugar se abordó un camión de la empresa Autocar de la ruta 58, con destino al fraccionamiento Vista Real; en el autobús, se encontraban en los asientos de la parte trasera, dos jóvenes, aparentemente estudiantes, y un adulto.
La siguiente parada de la unidad fue sobre la avenida Tulum, a la altura de Plaza Galerías, donde un grupo de aproximadamente 10 alumnos de preparatoria, entre hombres y mujeres subieron, las jovencitas, que usaban pantalones entallados, atraparon la mirada de los tres pasajeros que estaban en la parte trasera del autobús, quienes dirigían la vista a los glúteos.
El camión continuó su trayectoria y en la siguiente parada, frente a la estación de Bomberos, subió otro grupo de poco más de 15 estudiantes; en la medida que continuaba el recorrido, el autobús se llenaba más; hasta llegar la avenida José López Portillo, antes del cruce con la avenida Uxmal.
En ese lugar, más de cinco estudiantes se incorporaron al transporte, al dirigirse a la parte trasera del autobús, uno de los jóvenes en forma de broma, al pasar por detrás de su compañera recargó su cuerpo en ella, y continuó su trayectoria, para posteriormente hacer lo mismo con otro compañero, ambos reaccionaron con un amague de golpe mientras se reían.
Esta situación se repitió una vez más con otros estudiantes que subieron sobre la misma vialidad, a la altura del Colegio de Bachilleres Cancún Uno.
La reacción de las estudiantes no fue de desagrado, pues se reían después de lo sucedido, además de amagar con golpear a los que realizaron la broma.
Al preguntarle a una de las estudiantes si se había sentido acosada mientras viaja por el transporte público, indicó que sí, sobre todo por los adultos, pero no había sido víctima de alguna falta de respeto.
Durante el mismo viaje, sobre la avenida Kabah, esquina con Talleres se subió una mujer embarazada, que estuvo parada por aproximadamente tres minutos, hasta que otra mujer le cedió el asiento, aún cuando a su alrededor habían hombres estudiantes.