CANCÚN.- La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) realizó ayer supervisiones en diferentes sitios que ofrecen servicio al turismo, con motivo de la Semana Santa.
En el caso de Quintana Roo, hay una gran responsabilidad de los prestadores de servicios turísticos, lo que no implica que si notan algo fuera de la ley proceden a sancionar, dijo Ernesto Nemer Álvarez, titular de la dependencia, que personalmente llevó a cabo dicho operativo.
El aeropuerto internacional de Cancún, la terminal Autobuses de Oriente (ADO), un hotel, Plaza la Isla y el restaurante “Las Pescadillas” de la zona hotelera, fueron los puntos programados.
El arranque fue en el hotel Bonampak en el centro de la ciudad, el procurador colocó sellos de suspensión en el lugar por el cobro de servicios de lavandería, llamadas telefónicas, persona extra en una habitación y extravío de llaves, todas estas anomalías no estaban dentro de los términos y condiciones estipulados por el hotel.
En el ADO en uno de los módulos de atención se realizó una suspensión, esto al no exhibir los precios como corresponde.
En el aeropuerto se colocaron dos sellos de suspensión en dos módulos de rentadoras de autos por no exhibir los precios. En las visitas que realizadas en la zona hotelera no hubo problemas.
Evitar el abuso a turistas
“Nos parece fundamental estar personalmente en los destinos turísticos del país encabezando los esfuerzos de la procuraduría para proteger la economía de los consumidores”, añadió.
Se busca evitar el abuso a toda costa de los proveedores, en la actualidad la continuidad de las quejas de los usuarios está por encima del 70% a favor del consumidor, indicó.
Consideró la colocación de módulo de atención por parte de la Profeco de manera permanente para extranjeros en el Caribe mexicano debido a la constancia elevada de turistas prácticamente todo el año, pues la nueva etapa de la procuraduría es fortalecer a las delegaciones.