MÉRIDA.- Aunque se supone votaron por un cambio, los habitantes de Valladolid y de Progreso ahora sufren las consecuencias negativas de su voto, pues, entre otras cosas, les aumentarán el costo del servicio del agua potable. En el municipio del oriente del estado gano Alpha Tavera, de MORENA, y en el municipio costero triunfó José Cortés Góngora, postulado por el PANAL.
En la Sultana de Oriente, a partir de este uno de julio aumentarán las tarifas doméstica y comercial del agua potable, en 28% y 58% respectivamente, además de que disminuirá el consumo mínimo, que ya no será de 20 metros cúbicos sino de 15 m3. Con el alza, ahora el consumo doméstico pasará de $70.30 a $90.30, y el comercial de $114 a $180.
Ante este aumento, numerosos habitantes han levantado la voz para que la alcaldesa y sus funcionarios busquen otras “estrategias para robar dinero”, ya que con el agua no es justo, debido a que es un elemento de primera necesidad.
No debe subir el agua de ninguna manera, ya que es un elemento de primera necesidad, además de que el servicio es irregular, ya que hay días que el suministro no llega”, señaló María Salazar.
Es mucho lo que le quieren subir, la situación está difícil ahora y luego vas a pedir ayuda a la presidenta y te dicen que no hay dinero; buscan la forma de sacar dinero y con lo más esencial, luego nos van a cobrar por respirar”, dijo Andrés Guerra, vendedor de verduras.
En Progreso la situación es similar, ya que con el argumento de que las tarifas no suben desde 2010, el Ayuntamiento anunció que propondrá un alza del 10 por ciento a las tarifas. La propuesta se hará ante el consejo de administración del Smapap a mediados de julio.
“Es una burla que se aumente el pago del agua, ya que aún no se resuelve el constante desabasto que sufre la ciudad y sus comisarías, pues esta semana se paró el bombeo del vital líquido en esta ciudad para reparar una fuga”, indicó Carlos Gutiérrez, comerciante del mercado municipal.