MÉRIDA.- A seis meses de cárcel fue condenado Marco Antonio Osorio Ramírez (a) “El Buki”, quien se introdujo en una posada del puerto de Sisal, donde intentó violar a una mujer.
Para evitar el ultraje, la agraviada le dijo que tenía sífilis y se puso a llorar, lo que desconcertó al sujeto, que optó por retirarse tras cortarse la mano con el cuchillo con el que amenazó a su víctima.
Tras confesar su delito y atenerse a un procedimiento abreviado, “El Buki” logró que se le impusieran seis meses de cárcel, es decir, un tercio de la pena mínima señalada para el delito que cometió.
También deberá ser amonestado a efecto de que no reincida y se le condenó al pago de una reparación del daño moral causado, se le suspendieron sus derechos políticos electorales y se le pidió no acercarse a la víctima y al lugar donde tiene su residencia por un plazo de tres años.
“El Buki” es responsable del delito de abuso sexual cometido con violencia física y moral en agravio de una mujer que descansaba en una posada de Sisal, el pasado 17 de marzo.
Los hechos indican que en horas de la madrugada de ese día la afectada estaba en un cuarto de la posada “El Tío Moo” cuando escuchó un ruido en la ventana por donde presuntamente se introdujo el imputado.
Una vez en el interior de la habitación, bajo amenazas y armado con un cuchillo, presuntamente tocó a la afectada sobre la sábana con la que se cubría, mientras la mantenía amenazada.
La afectada pedía que parara mientras lloraba, por lo que en un momento determinado el indiciado abandonó el cuarto al cortarse una mano con el arma, lo que aprovechó la denunciante para salir y pedir ayuda a su novio, y presentar una denuncia ante las autoridades.