MÉRIDA.- Un joven liderazgo del Partido Acción Nacional, Gabriel Millet Peón, renunció hoy sábado a poco más de 12 años de militancia, debido a que la pérdida de valores y principios de Acción Nacional es intolerable.
Este es el nuevo caso de un panista que se aleja del PAN, debido a prácticas antidemocráticas, a la corrupción de los líderes y a que el PAN está secuestrado. Antes renunció Sofía Castro Romero, quien pidió licencia a su cargo de diputada local.
Antes, Alberto del Río Leal y la diputada Mary Yoly Valencia Vales marcaron su distancia con el proyecto de Mauricio Vila; el ex diputado pidió a los ciudadanos reflexionar el voto y la diputada dijo que apoya a Ana Rosa Payán Cervera, candidata de Movimiento Ciudadano a la alcaldía meridana.
Hoy sábado, a través de una carta enviada al presidente estatal del PAN, Hugo Sánchez Camargo, Gabriel Millet expuso que lamenta que el Ayuntamiento de Mérida sea un botín político para premiar a militantes de dudosa trayectoria y a empresarios, a fin de apoyar económicamente las campañas, en las que prevalecen los “moches” a familiares de gobernantes en turno, como ha sido señalado y bien documentado el caso de los hermanos Barrera Concha, en varios medios locales.
También dijo que “son muchos los motivos de los que me duelo, como ver el pecaminoso camino que nos tiene ante una derrota inminente, como nunca antes en más de 25 años en Mérida; sin embargo, lo que no puedo seguir tolerando es ver como se corrompe a las estructuras y a los nuevos panistas, a los que me consta como nos han querido silenciar con la burda promesa de un trabajo; no señor, habíamos militantes que no necesitamos de premios, lo hacíamos por el bien común”.
“Por lo anterior e invocando mi congruencia, me permito renunciar de manera irrevocable a mi militancia activa de poco más de 12 años, toda vez que al día de hoy son mayoría los falsos líderes que tienen secuestrado al PAN y que gozan de dádivas a el fin de defender lo indefendible”, finalizó.
Vale la pena mencionar que Millet Peón goza de amplia simpatía, principalmente entre militantes del cuarto distrito local (norte de la ciudad), en donde en varias ocasiones había intentado ser candidato a diputado y precisamente por las irregularidades que menciona no se había concretado este proyecto.