MÉRIDA.- El “pepinero” Alejandro Hernández Martínez, de 37 años de edad, acusado del delito de homicidio calificado en grado de tentativa, estuvo a unos minutos de salir por su propio pie de la Sala Uno de Oralidad del Centro de Justicia Oral de Mérida en compañía de su familia, al declarar el Juez Primero de Control, Lic. Luis Armando de Jesús Mendoza Casanova, como ilegal su detención, lo que no ocurrió, al aceptar la defensora de oficio que el Ministerio Público le formulará cargos.
Ayer por la tarde se llevó a cabo la audiencia de control de detención, donde el Ministerio Público presentó sus argumentos y la defensa hizo lo propio.
El detenido hizo manifestaciones en el sentido de que fue golpeado en el pecho y en las nalgas.
El Juez pidió a la autoridad investigadora que tome cartas en el asunto y en un plazo de cinco días informe sobre la investigación. Hernández Martínez se reservó el derecho a declarar.
Sin embargo, luego de las exposiciones se declaró ilegal la detención, al excederse el Ministerio Público por unos minutos de las 48 horas establecidas por la ley, para presentar a determinada persona ante el Juez.
En esos momentos, ante la inminente libertad del individuo, el Ministerio Público pidió al Juez que se llevara a cabo la audiencia de imputación, se le preguntó a la defensora pública si estaba de acuerdo con el planteamiento de la autoridad y no supo qué responder.
El inculpado pidió un receso de 10 minutos para que su defensora le explicara a que se referían con la imputación y el Juez les dijo que no podía dar un receso para que consulten, que lo hicieran en esos momentos en la misma sala y decidieran, ya que tenía que resolver al respecto.
Pasados unos minutos, la defensa y Hernández Martínez dijeron que escucharían la imputación de la autoridad ministerial, aunque se reservaría el derecho a declarar.
Fue entonces que los fiscales respiraron luego de la amonestación del Juez, pues en caso de que no hubieran accedido el acusado y su defensa, la imputación se hubiera hecho en otra audiencia a programar, ya que aunque fue por unos cuantos minutos, se permaneció en incertidumbre jurídica.
En los hechos se expone que elementos de la Secretaría de Seguridad Pública, por instrucciones de la UMIPOL, se trasladaron a 3 kilómetros de Dzilam de Bravo, a bordo de una unidad marítima, ya que se reportó a un grupo de sospechosos en un sancochadero clandestino de pepino de mar.
Al arribar los agentes se dieron cuenta de que había 3 embarcaciones y un grupo de siete sujetos realizaba una conducta ilícita. Al descender, los agentes fueron recibidos a balazos, por lo que solicitaron refuerzos y se logró la captura de los individuos, a quienes decomisaron un arma 9 milímetros con su cargador abastecido y un bulto con 30 cartuchos del mismo calibre y una escopeta calibre 16. También se incautaron 500 kilos de la especia marina en veda.
Asimismo se ocuparon las embarcaciones, pero de todos ellos solamente se puso a disposición del Juez del fuero común a Hernández Martínez, por el delito de homicidio calificado en grado de tentativa, al ser señalado como la persona que efectuó los disparos hacia los agentes, entre ellos a Pedro Joaquín Sierra Aguirre y Carlos Ek.
Según se comentó, el producto, embarcaciones y carpetas sin detenidos fueron consignados a la autoridad federal. Los “pepineros” ya se encuentran libres y poco faltó para que el séptimo de ellos también se fuera.
Al formular el Ministerio Público cargos a Hernández Martínez, solicitó al Juez, como medida cautelar, la prisión preventiva tomando en cuenta el delito imputado, a lo que el Lic. Mendoza Casanova accedió y la audiencia de vinculación fue programada para el próximo 21 de abril a las 9 de la mañana.
Los hechos imputados se registraron el pasado 14 de los corrientes alrededor de las 8:40 horas.
Por Esto.-