WILTON MANORS, Florida, EE.UU. (AP), lunes 17/07/2023.- Cuando Alicia Griggs sale de su casa en un suburbio de Fort Lauderdale, la nueva especie invasora de Florida pasa dando brincos por la calle: conejos cabeza de león.
Los conejos, que tienen una llamativa melena larga en la cabeza, quieren la comida que lleva Griggs. Ella es también su mejor oportunidad de sobrevivir y trasladarse al lugar donde debe estar esa raza domesticada: dentro de las casas, lejos de los autos, los gatos, las rapaces, el calor de Florida y, quizá, exterminadores contratados por el gobierno.
Griggs lidera los esfuerzos de reunir los entre 20.000 y 40.000 dólares que costaría que un grupo de rescate capture, esterilice, vacune, acoja y después regale los entre 60 y 100 conejos que ahora viven en Jenada Isles, una población de 81 viviendas en Wilton Manors.
Son descendientes de un grupo que liberó ilegalmente una mujer que los criaba en su jardín cuando se trasladó hace dos años.
“De verdad necesitan ser rescatados. De modo que hemos intentado que la ciudad lo haga, pero sólo dan largas”, dijo Griggs. “Creen que si lo hacen, tendrán que librarse de las iguanas y todo lo demás que la gente no quiere tener por miedo”.
Monica Mitchell, cuya organización East Coast Rabbit Rescue probablemente dirigiría la operación, dijo que capturar, atender y encontrar hogares para ellos “no es un proceso sencillo”. Pocos veterinarios atienden conejos y muchos posibles dueños se echan atrás al descubrir cuánto trabajo requieren los animales. Griggs se mostró de acuerdo.
“La gente no se da cuenta de que son mascotas exóticas y son complicadas. Tienen un sistema digestivo complicado y tienen que comer una dieta especial”, explicó Griggs, que es agente de bienes raíces. “No se les puede simplemente echar unas sobras de comida”.