MÉRIDA, Yucatán, jueves 29/09/22.- Por lo menos 14 alumnos de la UNID Yucatán ampliaron la lista de defraudados por esta universidad, a lo largo y ancho del país, ya que desde 2020 se niega a entregarles sus títulos profesionales.

A cada uno de los afectados les “robaron” por la UNID entre $15 mil y $20 mil, que es el costo del trámite de titulación y el director de la UNID, Eduardo de la Rosa Guzmán, sólo da evasivas, afirmaron los afectados.

Los 14 jóvenes defraudados estudiaron la Licenciatura en Derecho, en la Universidad Interamericana para el Desarrollo (UNID) que tiene su base en Vista Alegre y acabaron sus estudios en abril de 2020.

De acuerdo con varios de los afectados, la UNID les dice que por el COVID están retrasados los trámites en la SEP y les aseguran que sus documentos ya se enviaron a las oficinas centrales y que los tramitadores están realizando el proceso.

Sin embargo, los directivos de esa universidad, que le ha hecho lo mismo a jóvenes de Quintana Roo, Tijuana y otras partes del país, se niegan a responder si el trámite REALMENTE está en proceso.

“No nos dan fecha cierta del inicio del mismo, de modo que no sabemos si sólo tienen archivados nuestros expedientes o si realmente ya está en proceso y si realmente hay atrasos de parte de la SEP”, indicó una de las jóvenes afectadas.

Cuando algunos preguntaron si era posible ver el trámite de manera personal en la Ciudad de México, los directivos de la UNID les dijeron que no es posible y que la única forma es a través de la Universidad.

Lo que les deja dudas sobre la veracidad de las palabras de los directivos de esa universidad es que varias universidades en el estado, que terminaron mucho después que nosotros, ya están entregando sus títulos.

“La Universidad Interamericana para el Desarrollo (UNID) viola nuestro derecho constitucional a ejercer la profesión, pues, de manera indolente y mediante evasivas, han suspendido y prolongado la entrega de nuestro título profesional y la cédula”, precisaron los entrevistados.

Los jóvenes afirman que como egresados de esa institución están siendo afectados de manera directa, ya que, al carecer de título profesional, no pueden continuar con su desarrollo académico, es decir para poder iniciar una maestría en alguna institución que no sea la de ellos, pero les afecta más en el ámbito laboral, pues no pueden ejercer la profesión de acuerdo a lo previsto en la Ley de Profesiones del Estado de Yucatán.