TIZIMÍN, Yucatán, miércoles 24/08/22.- Dicen que madre solo hay una, pero una tan ebria y despiadada solo B.B.V., de 29 años, quien se metió a una cantina y dejó abandonada a su hija a las puertas del local.

Al sentirse sola, la menor de nueve años comenzó a llorar e intervinieron unas personas que avisaron al padre de la niña, que en ese momento estaba trabajando, y a la policía.

Los hechos ocurrieron el pasado lunes, cuando policías municipales de Tizimín recibieron el reporte de una niña sola y llorando junto a las puertas de la cantina “Dandy”.

Al llegar los oficiales ya estaba con la niña el padre, que pidió permiso de su trabajo y llegó tan rápido como pudo.

Los agentes entraron a la cantina y detuvieron a la madre, quien estaba en total estado de ebriedad y agredió a las oficiales.

También detuvieron al encargado de la cantina e inspectores de salud municipal clausuraron el establecimiento.

De la menor se hizo cargo su padre.