TUNEZ martes 24/08/21.- El presidente de Túnez, Kais Saied, mantendrá todos los poderes absolutos que se arrogó y no restablecerá la normalidad democrática que interrumpió el pasado 25 de julio, fecha en la que anunció la suspensión por un mes de la actividad del Parlamento y destituyó al jefe del Gobierno, informaron fuentes en el palacio presidencial de Cartago.

Según las mismas, el ultraconservador mandatario se dirigirá en las próximas horas a la nación para argumentar las razones que le han llevado a prolongar el golpe de Estado blando, pese a la insistencia la comunidad internacional, que le pide que recupere el camino de la democracia en el único país que hasta la fecha había sobrevivido al fracaso de las “primaveras árabes”.

Saied, un profesor universitario de tendencia populista que sorprendió al ganar las presidenciales de 2019 sin apoyo de partido alguno, aseguró entonces que imponía la aplicación del artículo 80 de la Constitución -que le permite suspender la Cámara y gobernar a través de decretos- para “salvar el país”, sumido en una aguda crisis política, económica, social y sanitaria.

El presidente de Túnez, Kais Saied, mantendrá todos los poderes absolutos que se arrogó y no restablecerá la normalidad democrática que interrumpió el pasado 25 de julio, fecha en la que anunció la suspensión por un mes de la actividad del Parlamento y destituyó al jefe del Gobierno, informaron fuentes en el palacio presidencial de Cartago.

Según las mismas, el ultraconservador mandatario se dirigirá en las próximas horas a la nación para argumentar las razones que le han llevado a prolongar el golpe de Estado blando, pese a la insistencia la comunidad internacional, que le pide que recupere el camino de la democracia en el único país que hasta la fecha había sobrevivido al fracaso de las “primaveras árabes”.

Saied, un profesor universitario de tendencia populista que sorprendió al ganar las presidenciales de 2019 sin apoyo de partido alguno, aseguró entonces que imponía la aplicación del artículo 80 de la Constitución -que le permite suspender la Cámara y gobernar a través de decretos- para “salvar el país”, sumido en una aguda crisis política, económica, social y sanitaria.

Asimismo ha intensificado su ataque a los partidos políticos, y en especial a “Ennahda”, que atraviesa una grave crisis de valores y pugna por diseñar su futuro en medio de los problemas de salud de su líder, hospitalizado por dos ocasiones en las últimas semanas.

El lunes, el partido anunció la disolución de su comisión ejecutiva y el inicio de un proceso de “reorganización que se adapte a los requisitos del escenario (político actual), logre la eficiencia necesaria y contribuya a buscar una salida a la situación excepcional que vive Túnez”.

INFOBAE