MÉRIDA, Yucatán, lunes 07/12/20.- Acusado de matar a dos personas en una casa de la colonia “San Damián”, a Jorge Isaac O.A. de 26 años de edad, sólo le darían 40 años de cárcel, de modo que literalmente un homicidio quedará impune, debido a las leyes mexicanas.

A este joven al que detuvieron por  agentes de la Policía Estatal de Investigación (PEI) acusado del delito de homicidio calificado y lo imputaron ayer por el juez Santos Alfredo May Tinal, pero el acusado se acogió a la ampliación del terminó constitucional, de modo que la audiencia de vinculación será el jueves 10 de diciembre.

A Jorge Isaac lo acusan de matar con un arma blanca a Pedro A.N. y a Víctor Manuel M., el martes 1 de diciembre,  cuando estaban en una reunión con los ahora occisos y en un momento dado discutió con ellos y los asesinó.

Víctor murió desangrado por una puñalada en un pulmón y Pedro falleció también desangrado, pero por una herida en la  arteria carótida y poplitea izquierdas.

En la audiencia realizada en el Juzgado Segundo del Centro de Justicia Oral de Mérida, los fiscales adscritos formularon la imputación del delito y aportaron los datos de prueba que existen en la carpeta de investigación para solicitar la vinculación a proceso del imputado, quien pidió la ampliación del término constitucional para definir su condición legal, por lo que el Juez Segundo de Control estableció que la audiencia continúe el próximo jueves 10 de diciembre.

Le impusieron la medida cautelar de prisión preventiva, de modo que el imputado permanecerá detenido en lo que se resuelve su situación jurídica.

El sábado publicamos que la Policía Estatal de Investigación (PEI) detuvo a Jorge Isaac O.A. de 26 años de edad, el asesino de Víctor y Pedro, en la colonia San Damián, cuyos cuerpos fueron encontrados tirados a fuera.

El miércoles pasado, policías de la Secretaria de Seguridad Pública (SSP) encontraron, el auto Chevrolet Beat de color rojo, completamente calcinado y, según las primeras indagatorias, después de haberse cometido el doble homicidio en la colonia San Damián él o los victimarios robaron el coche para huir del lugar, luego le prendieron fuego, lo quemaron para borrar todas las pistas que puedan dar con el paradero de ellos y lo abandonaron el fraccionamiento Diamante Opichén, cerca de las instalaciones de JAPAY.

De acuerdo con las indagatorias, los tres ingerían bebidas alcohólicas, pero comenzaron a discutir hasta que el ahora detenido ultimó a sus compañeros de parranda con un arma punzocortante, luego tomó el automóvil de éstos para huir del lugar.

Poco después, en un fraccionamiento del poniente de la ciudad, prendió fuego al vehículo y lo abandonó.

Datos preliminares indica que los dos hombres vivían juntos y organizaron una fiesta que tuvo un final sangriento, con la muerte de los anfitriones.

Este doble homicidio ocurrió en la casa marcada con el número 221, de la calle 9 entre 30 y 32, de la colonia San Damián.