Por Martha López Huan
MÉRIDA.- Ricky Martin llega como un torbellino e inyecta “Adrenalina” pura a más de nueve mil personas en El Coliseo Yucatán, cuyos cimientos vibraron con la fusión de voces, ritmos, coreografías y sus éxitos logrados a lo largo de 23 años de carrera.
Los acordes del primer tema, denominado “Come With Me”, marcaron el éxito del concierto que forma parte de la gira Ricky Martin Live in México, porque las admiradoras no dieron tregua: cantaron cada estrofa, marcaron con sus cuerpos cada ritmo y ovacionaron al puertorriqueño que ha ganado importantes premios en México y el mundo.
Al concierto del puertorriqueño asistieron Sarita Blancarte, esposa del gobernador Rolando Zapata Bello, y la fiscal del estado Celia Rivas Rodríguez.
El calor humano que brindaron fue tan grande que el artista se quitó el saco en la segunda canción -“Shake your Bon Bon”- y El Coliseo vibró otra vez.
-Buenas noches Mérida, ¿están listos para bailar y cantar? Vamos a olvidarnos de los problemas y disfrutemos- dijo Ricky Martin y gritos y aplausos subieron de tono con los primeros acordes de uno de los temas que lo encumbró: “Vuelve”.
Ese fue el inicio de una gran noche que registró cambios de vestuario, nuevas coreografías, vídeos, arreglos y temas tan candentes que todos vivieron la vida loca, contagiándose con energía y ritmo. ¿Las mujeres? No dejaban de gritar “te amo”.
Ricky, como prometió al principio, se entregó en cuerpo y alma y ofreció un concierto único en el que combinó sus temas románticos con los bailables: “Vamos a fusionar nuestros ritmos caribeños”, sentenció y con el apoyo de su ballet y músicos literalmente convirtió al Coliseo en un remolino de sabor.
No necesitó más y después de casi dos horas, el astro boricua intentó irse como llegó: como una bomba llena de energía combinando ritmos y fusionando sentimientos.
-Pido un aplauso para el maravilloso público de Mérida. Muchas gracias Mérida– dijo Ricky Martin y se fue del escenario con el ritmo de la “Copa de la vida”.
Unos minutos después, ante el grito de “otra”, “otra” y “otra” volvió con otro de sus clásicos: “A medio vivir” dejando extasiada a la multitud, porque todo se quedó por la mitad…