MÉRIDA.- De 2010 hasta principios de agosto de este año, Juan Gabriel estuvo por lo menos seis veces en Mérida, y la mitad de ellas de paseo y la otra para ofrecer sus emocionantes y emotivos conciertos, el primer de los cuales fue a finales de los 90s en el estadio Kukulcán.
“Hasta que te conocí, vi la vida con dolor, no te miento fui feliz, aunque con muy poco amor. Y muy tarde comprendí, que no te debía amar, porque ahora pienso en ti, más que ayer, mucho más…” fueron las estrofas que el público yucateco entonaba con pasión, dolor y amor durante los conciertos que Juan Gabriel ofreció en Mérida.

Su primera vez en la capital yucateca fue en el estadio Kukulcán, a finales de los 90s, escenario en el que hizo estremecer el recinto con sus éxitos.

Esa fue la primera vez que estuvimos en un camerino con el cantautor mexicano y en donde reveló que no le gustaba tener contacto con la prensa, “porque te hacen cada pregunta… y luego inventan cosas”.

Cinco horas después de ese concierto, en el hotel Fiesta Americana, nos brindó una breve entrevista en la que habló del cariño del público yucateco, de su trayectoria como cantante, de su deseo de volver a cantar en Bellas Artes y de su gran pasión.

–Cantar es mi pasión, es mi vida –indicó el compositor que falleció el domingo 28 de agosto de 2016, a las 11:30 horas, en Santa Mónica, California, a los 66 años de edad, cuya noticia impactó al mundo entero.
8.8
CONCIERTO MASIVO EN PASEO DE MONTEJO

El 15 de septiembre de 2010, Juan Gabriel ofreció un concierto masivo en el corazón del Paseo de Montejo, en donde festejó las Fiestas Patrias con los yucatecos.

En 2011 estuvo como invitado de honor del III Informe de Ivonne Ortega Pacheco: llegó en un avión privado y vestido de traje rojo.

También causó impacto, porque durante la Vaquería organizada al término del evento bailó jarana y convivió con las alegres mestizas y jaraneros.

En 2012 llegó como turista y visitó varios lugares emblemáticos de la ciudad.

“ESTOY CONTENTO DE VOLVER A MERIDA”

En agosto de 2013, cuando se anunció la llegada del cantante mexicano a Yucatán, dijo: “Me siento muy contento de volver a esta hermosa ciudad de Mérida”.

El 2 de noviembre de ese año, el autor de “Amor eterno”, Yo no nací para amar”, “Ya lo sé, que tú te vas”, “Déjame vivir”, “Te sigo amando”, “Te lo pido por favor”, “Me nace del corazón”, “No vale la pena”, “Querida”, “Abrázame muy fuerte” y “Se me olvidó otra vez” se presentó con mucho éxito en el estadio Kukulcán, aunque se le vio con excesivo sobrepeso, lo que evidenció su cansancio, en ocasiones la falta de aire y el deterioro de su salud.

De hecho, canceló su gira por Estados Unidos. Sin embargo, en abril de 2014 anunció su regreso a los escenarios presumiendo figura, rostro diferente y un aspecto saludable.

–Me siento fuerte y saludable y pronto cantaremos mis canciones en Miami y otras ciudades de Estados Unidos –aseguró en un vídeo que distribuyó entre diversos medios de comunicación de México al dar a conocer el itinerario de la reanudación de la gira mundial con coros, orquesta y mariachi.

LOS ULTIMOS DIAS DEL DIVO EN MERIDA

En febrero de 2016 se registró el último concierto de Juan Gabriel en Mérida: se llenó de tope a tope el Coliseo Yucatán, en donde con coro, orquesta, mariachi, cuerpo de baile y animadores sedujo al público yucateco que disfrutó sus poses y éxitos logrados a lo largo de más de 40 años de trayectoria.

A principios de agosto de este mismo año, el artista llegó de incógnito a la ciudad de Mérida a bordo de un avión privado para renovar su Visa en el Consulado de Estados Unidos en la capital yucateca.

Estuvo tres días en Mérida y bromeaba “me trajo el huracán”, ya que en Quintana Roo -donde vivía- se tomaban medidas de evacuación por la amenaza de un fenómeno meteorológico.

Vestido de blanco, con una gran capa de lujo, Juan Gabriel dejó anonadado al usuario del Consulado, a esos que tuvieron la dicha de verlo por última vez y que hoy quisieran decir: “Cómo quisiera, que tu vivieras, que tus ojitos, jamás se hubieran, cerrado nunca y estar mirándolos. Amor eterno e inolvidable…”