MÉRIDA, Yucatán, miércoles 03/12/25.- Aparte de que nunca llegó a la repartición de cerebros, la “Diputada Chapulina” María Esther Magadán Alonzo, en su afán de ganar créditos para que la hagan candidata a la alcaldía de Progreso, revive lo peor del pasado del PRI.

Se lo aconsejaron su padre Enrique Magadán y su madre María Esther Alonzo, los dos más grandes saqueadores del puerto, al igual que José Isabel Cortés, quien como alcalde robó como desesperado.

EN CONTEXTO: Ayer en la sesión del pleno del Congreso del Estado, Las Gritonas abuchearon, insultaron y le dijeron todo tipo de majaderías a los diputados de oposición que hablaban para defender al pueblo yucateco del presupuesto de 2026, que es, como dice Álvaro Cetina, de mentiras y de más impuestos.

Al igual que piensa Rommel Pacheco, quien dice que quiere ser gobernador porque ahí se roba bien, la “Diputada Chapulina” quiere ser presidenta municipal del puerto, porque ahí se roba bien, y un ejemplo son sus padres, que ahora son multimillonarios tras los descarados saqueos a Progreso.

A falta de estrategia política, la júnior de Magadán se dedica a revivir lo peor del viejo régimen, como la coacción del voto, el uso clientelar de programas sociales, lucrar con la pobreza y muchas atrocidades más.

Bien dicen que hijo de tigre pintito, aunque la “Diputada Chapulina” no es solo pintita sino además un títere de sus acaudalados padres, que quieren seguir saqueando el puerto.