MÉRIDA, Yucatán, jueves 27/11/25.- Luego de gozar de impunidad, protegido por varios jueces corruptos, entre ellos Rómulo Bonilla Castañeda y José Enrique Sáenz Dzul, el multidefraudador Arturo Millet Reyes se le acumulan las “priones justificadas”.

En el Penal meridano, a donde lo metieron desde el viernes de la semana anterior, le notificaron que el Tribunal Colegiado le impuso la medida de prisión preventiva justificada, por el robo de $117 millones, vía fraude o abuso de confianza, contra empresarios yucatecos.

Es decir, al Arturito se le volteó el santo que lo protegió durante poco más de 12 años, tiempo en el que evadió la cárcel, por el robo de $2.8 millones de dólares y de $117 millones de pesos.

EN CONTEXTO: Arturo Millet, desde 2013, les robó, vía abuso de confianza y fraude $117 mdp, a los inversionistas José Luis, Daniel Florentino y Aurelio Ernesto R.R, al igual que José Antonio C.B., Manuel Tomás M.F., Alfredo R.M. y Guillermo Andrés W.M.

Los afectados demandaron penalmente a Arturo Millet, empresario impulsor del Coliseo Yucatán y ex propietario de los Venados de Yucatán, de modo que lo imputaron y vincularon a proceso por el juez de control Rómulo Antonio Bonilla Castañeda, quien le impuso las medidas cautelares de firmar periódicamente; no salir del Estado sin autorización judicial, y depositar una garantía económica de 250 mil pesos.

Luego, el juez inventó miles de pretextos, como ha publicado El Grillo, y NUNCA lo encarcelo.

LA DETENCIÓN: Fue el viernes en la noche de la semana anterior, porque, con la complicidad de gente del Poder Judicial, se ha negado a pagar $2.8 millones de dólares que defraudó y estaba prófugo de la justicia.

Lo detuvieron, como publicamos el viernes, información que ampliamos el sábado, luego de evadir la justicia por lo menos cuatro años, en complicidad con los jueces Rómulo Bonilla y José Enrique Sáenz Dzul.

En esos cuatro años, coludido con los jueces, el ex esposo de Gabriela López, chiapaneca hábil para engañar a gobernadores y lograr buen puesto, hasta fingió que estaba enfermo del corazón y llegó a una audiencia en silla de ruedas.

Antes que nadie, el viernes de la semana anterior, en la noche, El Grillo publicó que, tras recibir el pitazo de que la juez tercero de ejecución de sentencia libró una orden de reaprehensión en su contra, Arturo Millet Reyes intentó huir a Quintana Roo, pero poco después de las 8 de la noche lo detuvieron en la carretera Mérida-Cancún.

Protegido por gente del Poder Judicial, al calor del gobierno del estado, Arturo Millet estaba prófugo de la justicia desde hace meses, y aunque tenía prohibido salir de Yucatán, pretendía huir a Cancún.