MÉRIDA, Yucatán, lunes 20/10/2025.- Raúl Paz ya no sabe qué cara poner para agradar, no a los ciudadanos porque hace mucho que los perdió, sino a los mandamases de Morena a ver si le toca un hueso en el 2027.

Una vez que comprobó que es muy fácil robar el dinero del pueblo, para costear los vicios caros y para empolvarse, Raúl Paz trata de mil maneras de llamar la atención rumbo al 2027, pero lo más probable es que se quede chiflando en la loma.

A menos que tenga un padrino poderoso en el centro, que lo imponga como candidato, aquí no tiene futuro: No sabemos si el sanfelipeño ya lo perdono, porque hasta hace un año lo había desterrado y ni el más chiquito de los huesitos le dio y lo colocar en el canal del Congreso de la Unión.

El que ganó la elección, en su tercer intento, salió del PAN odiando a Paz, porque éste lo dejó fuera del Senado y de la candidatura al gobierno del estado y lo dejó fuera de la nómina estatal.

DESESPERADO: En su desesperación, Paz no duda en convertirse en un letz-Hé (lame huevos) más del gobernador, como muchos de los que pululan a su alrededor, y que seguramente serán muchos más conforme se acerque el 2027, año de elecciones intermedias.

Sin embargo, todo depende si Huacho Martín quiere perdonarlo; si me preguntan yo digo que no lo va a perdonar, aunque sí perdono al buen Paleto, quien este año si cantará en Xmatkuil.

LOS REPUDIADOS: Al igual que la Angélica Araujo, Paz es uno de los políticos más repudiados en Mérida, y en Yucatán en general, y, casualmente, ambos han salido en fechas recientes a brincar como bufones para ver si alguien los voltea a ver. Obvio no serán los ciudadanos.

Paz y Angélica Araujo compiten por ver quién se arrastra más para conseguir el ansiado hueso. Les vale que tengan, no pésima sino lo que sigue, de reputación.

Los videos que comparten en redes sociales se llenan de comentarios recordándoles su turbio pasado, pero ellos se placean como si fueran aves de blanco plumaje cruzando el pantano.

Diría mi cabrona y mal pensada abuelita que no tienen cara qué poner ante la gente, pero eso es lo que menos interesa en el partido por el que buscan hueso.

En Morena tal parece que hay competencia de impresentables para ver a cuál hacen candidato.