TIZIMÍN, Yucatán, martes 29/04/25.- El problema de la falta de agua potable en la ciudad, ante la total incapacidad del alcalde Adrián “CaraBobo” Quiroz Osorio, se agravó, pues ya ni el Hospital San Carlos tiene el vital líquido.
A punto de iniciar el noveno mes de ocupar, por golpe de suerte, la presidencia municipal el Tauch CaraBobo no busca ni su esquina, como se dice coloquialmente en el ámbito boxístico, y aunque Dios quiera ayudarle mandando lluvias, no saben como aprovecharlo.

NO SABE HACER LAS COSAS: Así es mi Grillo, el alcalde, acostumbrado a la corrupción, a hacer obras sin licitar, a estar más preocupado de robar y a no hacer las cosas como debe ser, ahora NO sabe como se hacen bien las cosas, afirmó nuestro fiel y veraz informante.
Grillito, a punto de iniciar el noveno mes, tiempo que dura un embarazo, el nené está a punto de nacer en el hospital San Carlos, y como dijeran los abuelitos, es un angelito, no sabe nada.
“Así es mi verde amigo, el Tauch CaraBobo no sabe nada, parece un recién nacido, y ahora se topa con que el hospital CARECE de agua para el aseo personal de los pacientes y para los servicios sanitarios, y prefiere callar y esperar”, afirmó nuestro entrevistado.
Además, el “chan pal” ya está por nacer y CaraBobo no ha comprado la cuna, es decir, no ha hecho nada: Trata de engañar a los tizimileños con banderazos de inicio de obra que se quedan en eso, solo para la foto y tratar de “calmar al pueblo”.
Mi grillo, un ejemplo de esto es el banderazo de inicio de repavimentación de calles, que desde hace dos meses se quedó en eso, un banderazo, pues el CaraBobo no ha hecho nada, precisó nuestro entrevistado.

Luego de OCHO meses de no hacer nada, de empeorar las cosas y de dejar mal lo que estaba bien, el alcalde Tauch CaraBobo ya tiene vergüenza, aunque yo no lo creo porque la perdió desde que empezó a robar, tiene vergüenza recordar esa frase de campaña: TENGO PALABRA Y SE CUMPLIR.
ABREN LOS OJOS: Ahora, los ciudadanos, los que ya vieron que por unos pesos cambiaron el bienestar de su Ciudad de Reyes, hoy convertida en Ciudad de Baches, le reclama al alcalde y dicen que su frase real es “NO TENGO PALABRA Y SÉ MANTIR”.
En un intento desesperado por engañar más a la gente, la semana anterior el alcalde CaraBobo hizo como que quiere hacer algo, pero solo logró arreciar las quejas por las calles destruidas desde hace dos meses (las que raspó y hasta ahora no ha repavimentado) y seguirán así.
CASTIGO DIVINO: Mi Grillo, como castigo divino, le cayeron dos lluvias fuera de temporada, para que se atrase más en las obras y las calles queden más mal, pues hace tiempo que debió repararlas: Debe aprender de Cecilia Patrón, quien en una ciudad cien veces más grande que Tizimín ya acabó con el lío de los baches en Mérida.
Bueno, mientras el alcalde CaraBobo planea como tratar de seguir engañando a los tizimileños, yo, “como un duende seguiré sus pasos”, para informar todo lo malo que siga haciendo, advirtió nuestro fiel y veraz informante.