MÉRIDA, Yucatán, jueves 26/12/24.- A los cinco tabasqueños mafiosos, que vinieron a Yucatán a guardarse de sus enemigos y de paso delinquir los vincularon a proceso penal y los dejaron presos.

El juez de control José Enrique Sáenz Dzul determinó que el cierre de la investigación de este caso sea de dos meses, para definir luego si los causados se someten a un procedimiento abreviado o se atienen a un juicio oral.

Encabezados por el líder Bruno G.M. (a) “Choky”, de 29 años de edad, esta pandilla la integran Alejandro P.C. (a) “Payro”, de 23; Antonio L.E. (a) “Toño”, de 34; Francisco Javier E. (a) “Misho”, de 31, y Kevin A.S. (a) “Kevin”, de 24.

A estos se les acusa de varios delitos: A “Choky” se le atribuyen los delitos de daño en propiedad ajena contra servidor público; ataques peligrosos contra servidores públicos; portación de armas e instrumentos prohibidos, y contra la salud en su modalidad de suministro de marihuana y metanfetaminas.

A “Payro”, delitos contra la salud con fines de suministro de marihuana; a “Toño” portación de armas, contra la salud por venta de marihuana; a “Misho” por portación de armas y contra la salud por venta de metanfetaminas, y a “Kevin”, contra la salud por venta de marihuana y metanfetaminas.

HISTORIA DE LA DETENCIÓN: El martes 17 de diciembre, los ahora detenidos estaban en un Jeep Sahara, placas del Estado, a excepción de “Choky”, quien estaba a un costado del vehículo, el cual estaba estacionado en el carril interior del Anillo Periférico, a la altura del kilómetro 11.1.

Eso llamó la atención de policías de la Secretaría de Seguridad Pública, quienes se acercaron a Bruno, pues habían recibido una denuncia anónima, por medio de la cual se les informó de la presencia de gente foránea que iba armada.

Bruno le dijo al agente que no era de su incumbencia su estancia ahí y sacó entre sus ropas un cuchillo para amenazarlo, el cual lo sometió.
“Kevin” descendió del vehículo del lado del copiloto y les exigió que los dejaran en paz y le lanzó golpes al agente.

Sin embargo, los uniformados sometieron a los dos tabasqueños y les pidieron a los demás que descendieran del vehículo y que dejaran sus pertenencias en el automotor.

En eso, el líder logró zafarse del agente y sujetó la playera del oficial y rompió la prenda.

Los policías de la SSP inspeccionaron a los tabasqueños y al poner a la vista sus pertenencias encontraron que el cabecilla llevaba una pistola réplica, escuadra, y una bolsita con “cristal”.

A “Kevin” le hallaron bolsitas transparentes con marihuana; a “Misho” le encontraron bolsitas con “cristal” y una réplica de pistola; a “Toño” le hallaron marihuana, y a “Payro” envoltorios con marihuana.