TIZIMÍN, Yucatán, miércoles 20/11/24.- Ya van casi tres meses con “zapotito” al frente del ayuntamiento y ese tiempo basta para que los morenistas empiecen a abrir los ojos y arrepentirse de haber apoyado a un niño grande, hijo de papi y consentido del suegro.

A 10 días de los tres meses, varios empleados también ven de cerca su primera evaluación laboral, pues dicen las malas lenguas que la sentencia fue clara: Estarás a prueba tres meses, si no cumples, te vas, y que venga el que el que sigue.

Es una manera de que “zapotito” se deshaga de sus compromisos de campaña con media ciudad, a la que le ofreció trabajo a cambio de que salgan con él a sus caminatas durante la campaña.

A otros les dio opciones, ¿Qué quieres? ¿Trabajo o apoyo de vivienda?, así que estimados tizimileños que no formaron parte del grupo de campaña, durante estos tres años, no les va a tocar nada de apoyos, pues hay una larga lista de espera.

Ahora bien, por qué sus regidores de bancada están muy calladitos, acaso ya los maiciaron, mientras que los expertos en obras están escondidos no le dan la cara ni sus propios simpatizantes.

Se acuerdan que “Zapotito”, de manos muy largas y mente de chiquito, dijo que regresaría a las comisarías, pues no lo ha hecho. No se han preguntado por qué no lo ha hecho? La respueta es muy clara: Porque simple y sencillamente tiene miedo a los reproches, ya que le debe favores políticos a la gente.

Zapotito hasta se esconde, no atiende a quienes van a esperarlo dos o tres horas en palacio y su secretaria grosera solo dice que no está, pero al poco esto escapa por la puerta secreta para no enfrentar los problemas y no dar apoyos que prometió