MÉRIDA, Yucatán, sábado 21/09/24.- Ante la tibieza y complicidad del presidente del Congreso del Estado, el vaquero #LechiLetzHe Wilmer Monforte Marfil, sigue impune la agresión del ebrio diputado Alejandro Cuevas Mena contra Álvaro Cetina.

Han pasado 10 días desde que “El Chacal”, envalentonado por el alcohol, empujó y amenazó al diputado panista, secretario de la Mesa Directiva, en medio del desmadre que armaron trabajadores del poder judicial, durante la sesión del pleno.

Pero si el #LechiLetzHé es cómplice, en honor a la verdad, también tenemos que decir que el mismo Álvaro y el líder de la bancada panista lo son, porque fueron pusilánimes y dejaron pasar a la “ligera” esta acción, lo que puede darle pie al “Chacal” a volver “pedo” a alguna sesión del pleno.

Es de sobra conocido que Cuevas Mena, al igual que muchos de nosotros, es adorador de Baco, lo que NO es un delito, sino un DELEITE, pero debe ser comedido y dejar sus adoraciones para cuando no “trabaje” en el Congreso del Estado.

Debieron exigir castigo, sanción, una llamada de atención pública y pedirle al “Chacal” que se disculpara, pero la bancada panista se contentó con lamentar el hecho…chen beyó…

TE LA REFRESCAMOS: El miércoles 11, en medio del zafarrancho ocasionado por trabajadores del Poder Judicial, que irrumpieron en recinto legislativo, el diputado chapulín Alejandro Cuevas Mena, con aliento alcohólico empujó y amenazó al diputado panista Álvaro Cetina.

El motivo de la agresión de este diputado fue sólo porque el joven panista pidió la palabra y en respuesta recibió la agresión, un empujón, y una amenaza verbal de Cuevas Mena (a) “El Chacal”, que se comportó a la altura de su apodo.

No lloren luego como niñas lo que hoy no supieron defender como hombres…