PROGRESO, Yucatán, jueves 11/07/24.- Tan intolerantes como bandidos resultaron la Chelita Magadán Alonzo y su esposo Edgar Zacarías, pues ante las publicaciones de los fraudes de los papás de la diputada local electa bloquean las notas, denuncian progreseños que querían leer la nota, pero se eliminaron.

En una actitud que demuestra la verdadera personalidad de esta diputadita, acostumbrada a que le cumplan sus caprichos de niña Fifí, la Chelita no soporta la crítica, aunque ésta tenga bases sólidas y esté documentada, precisaron nuestros informantes.

Los entrevistados advirtieron que esto es lo que los progreseños soportarán durante tres años: Intolerancia, mentiras y venganza de parte de esta pareja, que a toda costa busca llegar al palacio municipal no precisamente para servir al pueblo sino para servirse del pueblo y servirse con la cuchara grande.

En la nota se describía claramente como los papás de la Chelita, que fueron alcaldes, despojaron de tierras a los progreseños y se las entregaron a particulares.