BOGOTÁ (AP), jueves 21/12/2023.- Mikhail Krasnov camina por las calles empinadas de la ciudad colombiana de Tunja como cualquier vecino, solo que ya no es cualquier vecino. Ahora a su paso se juntan ciudadanos y lo rodean. “Tómeme una foto con mi alcalde”, dice una señora mientras posa abrazada con “el profe ruso”, como lo conocen.

Krasnov se convirtió en una de las sorpresas de las elecciones locales de octubre en Colombia. Un ruso —el único que vive allí— se impuso sobre personajes más conocidos de la política en Tunja, la conservadora capital del departamento de Boyacá, a unos 140 kilómetros de Bogotá.

“Mi mamá tiene raíces de Ucrania, mi papá de Rusia y yo soy colombiano”, afirma con convicción en conversación con The Associated Press, mientras explica que está en contra de la guerra entre Rusia y Ucrania, donde tiene amigos y familia.

En realidad, Krasnov nació en Sarátov, ubicada a unos 900 kilómetros de Moscú, en agosto de 1978, cuando aún existía la Unión de Repúblicas Soviéticas Socialistas. En 1999, se fue a vivir a Alemania, donde estudió Economía en la Universidad Humboldt de Berlín y fue allí desde donde labró su camino hacia Colombia.

Hace 15 años llegó a Tunja. Primero obtuvo la residencia y dos años atrás, la nacionalidad. Ahora, ha dado el salto a la política local.