MÉRIDA, Yucatán, miércoles 29/11/2023.- La sonoridad de decenas de instrumentos y las voces corales emitidas durante el magno concierto de clausura de semestre del programa Ko’one’ex Paax, revelaron el cúmulo de talento que existe en la entidad, por medio de la Red de Agrupaciones Musicales Infantiles y Juveniles de Yucatán.
El proyecto de la Secretaría de la Cultura y las Artes (Sedeculta) se realiza en colaboración con los municipios yucatecos e instancias como el Sistema Nacional de Fomento Musical. La finalidad es fomentar la creación y consolidación de ese tipo de agrupaciones con niñas, niños y jóvenes de entre 6 y 18 años.
En el teatro “Daniel Ayala Pérez” apareció la primera de ellas, la Orquesta Típica Infantil y Juvenil de Tekax con canciones que recordaron a las y los presentes el amor por nuestra tierra del Mayab, entre ellas la jarana “La fiesta del pueblo”, de Isolina Rosado y Manuel Burgos Vallina y “A Yucatán”, de la trova de Luis Espinosa Alcalá, además del puertorriqueño Bobby Capó, “Piel canela”.
La víspera navideña se sintió por medio del Coro Comunitario en Movimiento O’ol K’aay, que interpretó el anónimo “Posada mexicana”, el villancico inglés “Nöel”, la canción de Tesalónica “Gloria, hoy a la tierra el cielo envía” y “Paseo en trineo”, de Leroy Anderson.
La Banda Sinfónica Juvenil de Tizimín transportó al público a la época del danzón en “Teléfono a larga distancia”, de Antonio Sánchez y “Nereidas”, de Amador Pérez “Dimas”. Después presentó un popurrí de boleros con “Aquellos ojos verdes” y “Solamente una vez”, los arreglos de José Molina Comino.
La “Polka pizzicato”, de Johann Strauss y Josef Strauss; “Melodía en la menor” y “Libertango”, de Astor Piazzolla, fueron piezas que tocó la Orquesta Comunitaria de Cuerdas “Renacer”. También revivió las notas de “El Otoño”, de Antonio Vivaldi; “Huapango”, de José Pablo Moncayo y “Chan pal”, de Nazira Chejín y Felipe Gordillo, en esta última intervino el mencionado coro.
La Banda de Tizimín y “Renacer” cerraron el concierto a través de Marcha No.1 de Edward Elgar, titulada “Pompa y circunstancia”, que marca la solemnidad de alguna despedida.