MÉRIDA, Yucatán, miércoles 14/06/23.- Acostumbrado al dinero mal habido, como el que hiso en el IMSS de Campeche, Roger Marín Martín dejó al PAN y se fue a achocar a MORENA, pues piensa que ahí volverá a robar a manos llenas como hacen “Bobolín”, “Lechitas” y compañía.

De acuerdo con nuestros informantes, que lo conocen más que bien, aunque era ahijado político del nuevo perro de MORENA, Raúl Paz Alonso, el polémico Roger se unió al grupo de #MissTraición (Verónica Camino Farjat) en vez del de Rogerio ‘Bobolín’ Castro, en el que está el ‘Poch Pel’ (lujurioso) Paz.

MANOS VACÍAS: “Cansado de que en la JAPAY no pudo hacer sus acostumbrados ‘chanchullos’, Roger se fue y, pensando que en MORENA puede hacer jugosos ‘bisnes’, como los que ya dejaron millonario a ‘Bobolín’ Castro, se entregó al Guinda”, aseguraron nuestras fuentes.

El hocabense presume a cada rato, en redes sociales, fotos con su nuevo grupo (perdedor por cierto), al lado de personajes tan nefastos como Hidalgo Victoria Maldonado (ex secretario ejecutivo del Iepac) y Alejandrina León (ex regidora priista), quienes son operadores políticos de #MissTraición.

EL NEGRO PASADO: Tras salir por piernas de Campeche, debido a malos manejos en el IMSS del vecino estado, Rogerín regresó a Yucatán, donde en 2018 buscó la alcaldía de su natal Hocabá por el PAN, pero sufrió una estrepitosa derrota, ya que usó el dinero de la campaña en gastos personales, precisan nuestros entrevistados.

VIDA DE RICO: Entre sus excentricidades está que, al poco tiempo de su derrota, presumió que recién había adquirido un elaborado asador, y por ese motivo fue blanco de críticas, que lo exhibieron de haberse acostumbrado a la buena vida luego de lo que “robó” en el IMSS de Campeche, como publicó El Grillo el 21 de enero de 2019.

Tras “chechonearle” (llorarle) por un ‘hueso’ al gobernador Mauricio Vila (en ese entonces recién estrenado) Rogerín entró a la Japay como director jurídico, donde se le acabó el contrato y, ávido de dinero fácil se fue a MORENA, donde el requisito para pertenecer al partido es robar a manos llenas.