MÉRIDA, Yucatán, martes 02/05/2023.- La esperanza es lo último que muere y los sueños jamás fenecen, pero los sueños muchas veces se vuelven pesadillas y eso le pasaría al morenista de clóset, Jorge Carlos Ramírez Marín, al que sólo un milagro lo haría candidato a gobernador.

Siguiendo su sueño y con la esperanza intacta, el senador electo por el PRI, pero que le hace trabajos sucios a MORENA, junto con Verónica Camino Farjat, empezó ya su campaña y, con el pretexto de sus clínicas ya coloca espectaculares con su foto.

Si el sentido común impera en la política, en la que la razón no existe, tampoco la lógica y ni las matemáticas, el ‘Gordito Marín’ NO tiene cabida como candidato a gobernador en MORENA, partido en el que, si al caso, podría ser candidato a alcalde, pero de antemano sabe que en Mérida tiene asegurada su derrota, como hace poco más de año y medio.

El senador podría ser candidato a gobernador en el PRI, si decide hacerlo, pero sabe que también tiene asegurada la derrota, al igual que si compite por algún otro partido sanguijuela.

Es decir, su sueño, obsesión y su máximo deseo seguirá siendo una cruel y real pesadilla.

Pronto veremos la ciudad invadida por espectaculares con la cara del poch morenista o morenista de clóset, en busca de un sueño, que hasta ahora todo indica que se volverá en su eterna pesadilla y su obsesión incumplida.

Pero estamos hablando de política y en política no hay razón, lógica ni matemáticas, todo puede pasar y el gordito tiene dinero de sobra como para comprar la candidatura en el partido Guinda.