MOTUL, Yucatán, miércoles 26/04/23.- Bajo las órdenes del dueño de la ex hacienda Santa Teresa, un extranjero de nombre Oliver Henri, acusaron falsamente al campesino Armando Chuc Sánchez de varios delitos y, coludidos con el juez, lo dejaron preso, aunque los supuestos delitos no son graves.
Lo denunciaron el revoltoso Julio Balam y Arcadio Tamayo, comisario ejidal de Motul, quien con falsas firmas y asambleas amañadas despojó de tierras a los ejidatarios de Santa Teresa y se las vendió al extranjero, que según dicen está protegido por poderosos empresarios y políticos de Yucatán.
Luego de la denuncia, a Chuc Sánchez lo vincularon a proceso penal y le pusieron medidas cautelares, entre ellas ir a firmar cada mes, pero por enfermedad no fue a firmar en febrero y, más rápido que nunca, el juez le dijo que la receta era falsa y desde el 18 de marzo de este año está preso en el CERESO, aunque los delitos no son graves.
Es un campesino perseguido políticamente, afirman sus familiares, quienes dicen que el juez ni por motivos de salud lo libera.
“Hoy (por ayer) martes 25 de abril 2023 Armando Chuc es un preso político”, afirman sus hijos y su esposa; además, diversos grupos ejidales piden justicia y que el gobierno investigue este caso.
EL COMIENZO: En octubre 2019, en casa de Armando Chuc se reunieron, además del anfitrión, Rosendo Can; el apoderado legal de la hacienda Santa Teresa: Mario Méndez; Arcadio Tamayo, precandidato a la comisaria ejidal de Motúl; Julio Balam; Jorge Paat y Julián Can.
Acordaron apoyar a Arcadio para la candidatura de la comisaria ejidal de Motul, pero no se dieron cuenta que él tramaba llegar al cargo para poder vender las tierras ubicadas cerca de la ex hacienda Santa Teresa, a lo que ya se habían comprometido Arcadio Tamayo, Julio Balam y Mario Méndez, con el extranjero.
Las campañas comenzaron y Armando Chuc y sus seguidores afirman que no se enteraron que las que la comida y el apoyo económico para Arcadio Tamayo venia del dueño de Santa Teresa, el extranjero Oliver Henri.
Ganó Arcadio y su directiva la integraron Armando Chuc Sánchez, en el consejo de vigilancia; los respectivos tesoreros y secretarios; además, sin razón alguna designaron a Julio Balam como asesor del comisario ejidal, aunque no pertenece a los ejidatarios y carece de certificado agrario.
DESCUBRE LA TRANZA: Luego de un tiempo de trabajar en la directiva del comisario, Armando descubrió la venta ilegal de terrenos ejidales, de parte de Arcadio Tamayo, Julio Balam y de Mario Méndez.
Al verse descubiertos trataron de sobornar a Armando con $30,000, pero no los aceptó y se opuso rotundamente a esa venta.
En respuesta y en venganza, Arcadio Tamayo despojó de su cargo a Armando, sin consultarlo en una asamblea y designó a Abundio Mukul como consejo de vigilancia interino.
Desde entonces comenzaron a hostigarlo y Armando denunció a Julio Balam y Arcadio Tamayo, por la venta ilegal de terrenos y falsedad de firmas de cuórum: La denuncia llegó a la Reforma Agraria, a la Procuraduría Agraria y al Tribunal Agrario, el cual falló a su favor y se recuperaron 250 terrenos ejidales, vendidos ilegalmente con firmas falsa y falta de cuórum.
VENGANZA, LA RESPUESTA: Ante su derrota, Julio Balam y Arcadio Tamayo, servidores del extranjero, comenzaron a acusar a Chuc Sánchez, con falsedades, como que dijeron que secuestró el local del comisariado.
Además, de manera ilegal, en días de asambleas no le permitían la entrada y lo sacaban a él y a su grupo, que se oponían a la venta de terrenos. Lo acusaron de violencia y pandillerismo en las asambleas e incluso los detuvieron 24 horas en el en la cárcel municipal (Globo) y lo acusan de sabotear las asambleas.