MÉRIDA, Yucatán, jueves 23/03/23.- Luego de un breve duelo de poderes, de un manotazo sobre la mesa y del peso del ‘padrino’ de un residente, el lío y la huelga en el Hospital O’Horán se resolvió, según descubrió la Agencia Central de Inteligencia (ACI) de El Grillo.

La inteligente grillesca averiguó que todo concluirá con un “sana, sana, colita de rana”, cada quien se quedará con su golpe y todos los residentes involucrados volverán al hospital con la promesa de que se portarán bien y no propiciarán más conflictos… Aquí no pasó nada.

El martes publicamos que médicos residentes de la especialidad de Ortopedia del Hospital O’Horán comenzaron una asamblea permanente (huelga), en protesta porque la Secretaría de Salud de Yucatán (SSY) dio de baja injustamente a dos de sus compañeros.

La baja de los residentes, los doctores Francisco B.P. y Kathia P.S.C., ambos del tercer grado de la mencionada especialidad, fue por una denuncia de supuesto acoso laboral que hizo Jorge M.C., un compañero de menor jerarquía, pero quien se jacta de ser influyente porque su padre está bien “parado” en el Sindicato de Salud. El proceso contra los residentes comenzó a mediados de febrero, cuando les notificaron de la denuncia, pero todo fue tan rápido que les avisaron de las audiencias de un día para otro y no les permitieron tener abogados, entre otras irregularidades.

La ACI de El Grillo descubrió que el conflicto de residentes en el O’Horán va más allá de abusos der parte doctores de mayor jerarquía con los recién llegados y amenazó con enfrentar a directivos del hospital con las autoridades de la Secretaría de Salud.

El asunto no era menor e involucraba fuertes intereses, pues trascendió que uno de los residentes suspendidos es pariente de un constructor que trabaja de la mano con la actual administración.

Al principio se manejó la versión de que el residente agraviado era pariente de un “macuco” del Sindicato de Salud, pero en realidad se trató de un joven que sufrió los abusos y acoso laboral en el O’Horán, lo cual pudo comprobar mediante un expediente que arrojó la culpabilidad de dos residentes de mayor jerarquía (un hombre y una mujer), además del involucramiento de médicos de base del hospital.

Con las pruebas en la mano, la SSY procedió y suspendió a los dos residentes, pero la resolución salpicó a médicos del O’Horán, que abanicaron la protesta de los residentes de ortopedia, que entraron en huelga el martes y denunciaron injusticias en la sanción, aunque NO había tal.

La parte agraviada no estaba dispuesta a cruzarse de brazos y, ante la embestida mediática de los residentes sancionados, preparaban ya también su artillería.

Por otro lado, el conflicto ya estaba enfrentando a directivos del O’Horán con la SSY, de modo que gente de más arriba tuvo que intervenir para lograr una conciliación entre ambas partes.