MÉRIDA, Yucatán, viernes 09/09/22.- El Palacio de Buckingham informó el fallecimiento de la Reina Isabel II este 8 de septiembre, a los 96 años de edad en el Palacio Balmoral, Escocia, donde pasó sus últimos días bajo la supervisión de sus médicos.

Ante la noticia, los ojos del mundo se posaron en el palacio de Escocia, donde vacacionaba la Reina que tuvo 70 años en el trono, convirtiéndola en la más longeva de la historia de las monarquías del mundo.

En México, el presidente Andrés Manuel López Obrador envió sus condolencias a los pueblos del Reino Unido por el fallecimiento de la Reina Isabel II, monarca británica y soberana de 14 estados independientes.

En Yucatán, habitantes también lamentan la pérdida real ya que durante su primera visita a México, del 24 de febrero al 1 de marzo de 1975, incluyó Mérida, Uxmal y Tizimín, donde cautivó por su juventud y sencillez.

El 27 de febrero de 1975, la soberana llegó al aeropuerto Manuel Crescencio Rejón acompañada del Príncipe de Edimburgo y la Duquesa de Grafton.

La recibió el entonces presidente de México, Luis Echeverría Alvarez; el gobernador de Yucatán, Carlos Loret de Mola Mediz; su esposa Berta Vadillo Martínez de Loret de Mola, decenas de niños e integrantes de grupos de Scouts, quienes ondearon banderitas a manera de bienvenida.

En la zona arqueológica de Uxmal estuvo acompañada por las principales autoridades de México y Yucatán, miembros de la realeza y el arqueólogo Sir Eric Thompson, quien describía a la reina el legado de la cultura maya.

En ese sitio, considerado Patrimonio Mundial de la Humanidad, la Reina Isabel II participó en una cena especial para poner en marcha el espectáculo de Luz y sonido que estuvo durante más de 40 años en el centro del Cuadrángulo de las Monjas, hasta que el gobierno de Mauricio Vila Dosal lo sustituyó por vídeomapping y un recorrido nocturno por los senderos.

La segunda visita a México de la Reina Isabel II fue del 17 al 25 de febrero de 1983.

La recibió en Acapulco el entonces presidente Miguel de la Madrid Hurtado.

LOS PROTOCOLOS DEL FUNERAL

El Reino Unido, conformado por Inglaterra, Gales, Escocia e Irlanda del Norte, se alista para dar el último adiós a la soberana más longeva de su historia con un funeral que podría durar 10 días.

Según protocolos de la Operación Puente de Londres, organizado durante años ante el posible fallecimiento de la monarca, se ordena la suspensión temporal del Parlamento británico hasta el funeral.

Los restos mortales de la Reina serán trasladados en un tren desde el Castillo de Balmoral hasta el Palacio de Holyrood en Edimburgo y de ahí a la catedral de St. Giles, donde se espera que miles de personas acudan a rendir el tributo final.

Al día siguiente, el féretro real sería trasladado a Londres donde la reina será enterrada junto a su esposo el príncipe Felipe de Edimburgo en la cripta de la Capilla de San Jorge, en el Castillo de Windsor.

La familia real anunciará en las próximas horas detalles más precisos del funeral que incluiría la Abadía de Westminster, donde se darán instrucciones para un silencio de dos minutos en toda Inglaterra, al mediodía.

Con la muerte de la Reina, el protocolo marca que su hijo Carlos III se convierte en Rey de Inglaterra, pero no goza de la popularidad del pueblo, que espera que abdique en favor de su hijo, el Príncipe Guillermo.

Sin embargo, los funcionarios del Reino Unido confirman que aplicarán las reglas de sucesión habituales, pero aún no hay una fecha para que Charles Philip Arthur George, de 73 años de edad, suba al trono.