MÉRIDA, Yucatán, lunes 15/08/22.- Con los ojos cerrados y una frase en su mente, el senador Jorge Carlos Marín Ramírez sopló y apagó la vela de su cumpleaños 61, en un festejo que reunió a los poderosos mandamases del PRI, por eso faltó Panchito, no es poderoso.

Rodeado de su familia, de sus amigos de la universidad y de empresarios que lo han apoyado, “El Gordito Marín” celebró ayer, en el Club Libanés, su onomástico 61, acompañado de unas 500 personas, que botanearon sicilpac, frijol y chicharra, de botana, y comieron tacos de cochinita, lechón y relleno negro, de plato fuerte.

La sorpresa la dio Rolando Zapata Bello, quien, extrañamente, se dejó llegar al festejo, lo que no hacía nunca, porque JC lo celebra cada año; el ex mandatario estatal llegó acompañado de sus testaferros Víctor Caballero Durán y William Pérez Cabrera, sub secretarios de Acción Electoral del Comité Ejecutivo Nacional del PRI.

Acudió al festejo el diputado local Gaspar Quintal Parra y la presidenta municipal de Conkal, Hiselle Díaz Canché. Estuvo ausente Panchito Torres Rivas, presidente del Comité Directivo estatal tricolor, algunos dicen que no fue porque no es poderoso ni manda en el partido que motivó la película “La Ley de Herodes.

FLOTA MOSQUITO: Hubo también flota mosquito, como Ichi García y su hijo Totocho; el Chelito Carrillo; Nacho Mendicuti y los cuatro regidores meridanos, además de gente del interior del estado.

FLOTA SANGUIJUELA: La flota sanguijuela, a la que ya se le acabron sus días de sangrar al erario Legislativo también se dejó caer, a comer y beber gratis, entre ellos los perredistas Alejandro Cuevas Mena y Eduardo Sobrino Sierra, además del sangrador y vividor profesional, el chilando Harry Rodríguez Botello Fierro del PVEM.

En su discurso, el senador dijo que en el 2024 va con todo y por todo y que su prioridad es la salud, por eso inaugura clínicas en todo el estado.

Amenizaron el festejo el grupo Yahal Kab y un grupo de mariachis.

Rodearon al político sus hijos Jorge Carlos (a) Croata, Guillermo y Sisi, además de su esposa María Elena Granados.