MÉRIDA, Yucatán, sábado 09/07/22.- Presentadas con bombo y platillos y hasta alfombra roja y caravana, los coches eléctricos chinos contradicen en su andar lo colonial del centro de esta bella ciudad, pues son producto del siglo XXI.

Los automotores aparecieron en 1886, siglo XIX, cuando lo inventó Carl Benz, pero pasó tiempo para que se popularizaran, de modo que hasta antes de eso en todo el mundo se usaban calesas y carros tirados por caballos.

Este carro eléctrico, mala imitación de una calesa, le hace muecas a la ciudad, pues no es colonial ni siquiera antiguo, sino muy moderno, pero el mal ya está hecho, se vende como la novena maravilla del mundo.

Ojalá y no acabe mal esto de las calesas, como sucedió en Guadalajara, donde quedaron arrumbadas. Los caleseros no las pudieron pagar, las refacciones son muy caras, se descompusieron y ahí las dejaron abandonadas. Los caleseros volvieron a los caballos.

Ojalá y no pase porque será dinero de los meridanos tirado, porque finalmente nosotros pagaremos una parte, si no es que toda, porque tal vez los caleseros ni saquen para pagarlas.