MÉRIDA, Yucatán, jueves 21/04/22.- Bajo la muy fuerte sospecha de que un político del PRI manipuló a los jueces, el Tribunal Segundo de Enjuiciamiento condenó, como se temía, a una ridícula pena de 5 años y 10 meses de cárcel al sádico asesino y sexoservidor Braulio L.S.

La manipulación de este caso comenzó cuando a este asesino, que en diciembre de 2019 mató de 25 puñaladas y golpes en el cráneo del empresario artístico Sergio Serrano Navarro (Serranova), cuando el Ministerio Público imputó por el delito de homicidio simple, que se paga con una pena de 10 a 15 años, pero el juez, porque las palancas pesaron, lo vinculó por el delito de homicidio en riña, en carácter de provocado.

Con este delito, ya estaba planchada una sentencia de risa para un joven, que en poco tiempo saldrá de la cárcel, pensando que todo puede hacer, porque tiene palancas de “amigos” políticos.

La FARSA de condena fue ayer en medio de las protestas de familiares y amigos del empresario artístico Sergio Serrano Navarro, y los jueces de ese tribunal le impusieron al sádico asesino el pago en concepto de multa de un millón 690 mil pesos. La lectura de penas se efectuará el 27 de abril.

También “atendió” al político, quien lo ayudó a burlar a la justicia
El fallo de los jueces que integran ese Tribunal se inclinó a favor del tabasqueño, al que se le vincula con un político yucateco del PRI, con alto cargo en el sexenio rolandista y al que el sádico asesino atendió sexualmente; esta relación influyó en el ánimo de magistrados del Poder Judicial, para evitar que el escándalo sea mayor, pues iba a salir a relucir el nombre del político.

Durante la protesta de ayer, la madre de Serranova mostró en cartulinas fotografías del rostro y del cuerpo de su hijo, que lucía brutalmente masacrado, después de ser herido en más de 25 ocasiones en el cuerpo y golpeado en el cráneo con una figura de metal de la torre Eiffel.

El delito de homicidio en riña con carácter de provocado se castiga con pena corporal de 2 a 6 años de prisión y por el tiempo que el tabasqueño ha sido privado de su libertad, ya habrá compurgado gran parte de su condena, es decir, más tiempo de la sanción mínima.

Este hecho de sangre ocurrió el 6 de diciembre del 2019
El joven casi confeso, porque dijo que se entregó solito a la justicia, presunto responsable del sangriento crimen llegó por su propio pie al Centro de Justicia Oral, acompañado de sus abogados Jesús Antonio Alonzo Torres y Jorge Chan Pech, así como con su padre y otros familiares, entre ellos su novia, una joven embarazada.

De acuerdo con datos recabados, en 2018 el joven, quien dijo ser soltero y estudiante, que trabajaba en el restaurante bar “La Casita del Cheviche”, donde conoció a “Serranova”, ya que es socio del establecimiento.

Se hizo amigo del socio, quien lo invitaba a tomar cervezas y se mandaban mensajes por Internet; después hubo mayor acercamiento y acudía a casa de Sergio, ubicada en la calle 49-C entre 54 y 56 número 338 del fraccionamiento Francisco de Montejo, donde veían películas y videos.

De acuerdo con la declaración ministerial que realizó el joven al presentarse en forma espontánea al Ministerio Público, después de que le dieron de alta del Hospital O’Horán, donde le cosieron la mano por las lesiones sufridas con un cuchillo serrado, el extinto le practicaba sexo oral y a cambio le pagaba 600 pesos por cada encuentro.

El viernes 6 de diciembre, en horas de la noche, Braulio estaba en su casa cuando Sergio le llamó por teléfono y le dijo que quería verlo; el joven primero le respondió que no podía, ya que al día siguiente tendría partido de fútbol en la escuela, pero Sergio Serrano le insistió y le envió un taxi.

Al llegar a la casa de Sergio vieron videos y luego el promotor le practicó sexo oral y le pidió que lo penetrara, pero Braulio le dijo que no, ya que Serrano tenía una enfermedad contagiosa, entonces, según dijo el veracruzano, Sergio lo sujetó y lo volteó para hacerla de activo y le dijo que ya había invertido mucho dinero en él y era hora que le pagara.

Según la versión del joven, se resistió y le dio un cabezazo a Sergio y que en respuesta éste agarró un cuchillo de sierra, con mango de madera, y le lanzó tajos, de modo que lesionó al joven en las manos, una de ellas la tenía vendada durante la audiencia; forcejearon por el arma y logró desarmarlo.

Nomás 25 puñaladas le dio y además le robó al muerto
Agarró el cuchillo y, en lo que se puede considerar saña, le causó una serie de lesiones corto-contusas en el cuello, cara y cabeza, unas 25 en total, hasta verlo caer inmóvil.

Luego, Braulio metió ropas en una maleta y miles de dólares, se cubrió las heridas, pidió un taxi y le llamó a su padre, después fue a un consultorio de “Similares”, donde le aconsejaron que fuera a un hospital, ya que requería de puntos.

Con su familia se trasladó a la Clínica de Pensiones, pero debido al costo de la cirugía se dio de alta voluntariamente y fue trasladado al Hospital O’Horán; el día 7 de diciembre, después de contarle lo ocurrido a su familia, contrataron los servicios de unos abogados, que le aconsejaron que colabore con la justicia y se presentó voluntariamente a rendir declaración.

El tabasqueño Luna Sánchez, de 18 años en ese entonces, fue imputado por el delito de homicidio simple por el acaecido juez de control Luis Edwin Mugarte Guerrero, como presunto autor material del homicidio del empresario Sergio Serrano Navarro o Sergio Serranova.