UMÁN, Yucatán, jueves 11/11/21.- La semana anterior, Santos de Jesús B.V., (a) “Bunga”, 37 años de edad, salió apenas del CERESO, donde estuvo preso durante 10 años, por violación, y ayer mató a su ex pareja Jazmín V.P., en la comisaría de Dzibikak, porque ella ya tenía a otro y no quiso volver con él.

De acuerdo con datos recabados, a este sujeto lo condenaron por el delito de violación en noviembre de 2011, de modo que estuvo preso casi 10 años en el CERESO meridano, en donde lo encerraron cuando tenía 26 años de edad.

Ahora, con el delito de feminicidio, a este criminal le corresponden 60 años de cárcel, pero si la injusta ley y un juez sin capacidad le concede un procedimiento abreviado recibirías entre 30 y 40 años de cárcel.

Ayer publicamos que “Bunga” salió de la cárcel y ayer en la madrugada mató a su mujer, porque ella ya tenía a otro, de varios navajazos, en el campo deportivo de Dzibikak, no de esta ciudad como dijimos inicialmente, y luego del feminicidio huyó, pero la policía lo detuvo cuando iba a Mérida.

El artero feminicidio fue luego que la mujer salió de su trabajo en una bodega de Kekén, ubicada sobre la carretera federal Mérida-Umán, pero su ex ya la esperaba y, bajo engaños y fingiendo estar arrepentido la llevó a un campo deportivo, ubicado cerca de la casa de la ahora occisa, para platicar con ella.

En el lugar se sentaron en el recibidor de jugadores del campo de béisbol “20 de noviembre”, ubicado en la calle 20 con 26-F y, según las primeras averiguaciones, el sujeto intentó convencer a su expareja, de 36 años de edad, de que dejara a su actual pareja y que regrese con él, pero no la mujer no quiso, de modo que sacó una navaja y la apuñaló varias veces y murió en el lugar, mientras que él huyó.

Poco antes de las 5:00 de la mañana, personas que acudieron al lugar para hacer deporte se llevaron la macabra sorpresa de hallar el cadáver de la mujer, y avisaron a la policía.

Las policías estatal y municipal de Umán desplegaron un operativo de búsqueda y detuvieron al asesino, de 40 años de edad, cuando retornaba para Mérida de donde es originario.

El sujeto está ya en la Fiscalía, donde rinde su declaración por el presunto feminicidio en contra de su ex mujer.

Empleados de las bodegas de Kekén dijeron que los horarios nocturnos son peligrosos para las mujeres, porque las ponen en riesgo, pero que los jefes, por órdenes de los dueños se niegan a rotarlos y les dicen que si no aceptan su turno los despedirán.