MÉRIDA, Yucatán, miércoles 15/09/21.- La película del 2019 se repite: Los Leones ganaron dos juegos de visitantes en Monclova, vinieron a Yucatán, les hicieron Tomoc Chi y finalmente perdieron la Serie del Rey frente a los Acereros: exactamente igual pasará este año, porque si ganan en Tijuana me vuelvo mormón.

Falló San Patricio, no el santo irlandés, el santo matalote, de modo que, para pedir refuerzos invocaremos a San Martín de Porres, quien fue beisbolista y que también vio que se coronen los reyes de la selva, en 2018, desde la silla del palacio de la 61. Ojalá y eso ayude a los melenudos a ganar.

Mi corazón y mis más grandes anhelos me indican que quiero que ganen los melenudos, pero la realidad me abofetea con la verdad: Necesitan un milagro porque tienen todo en contra: publico agresivo; moral por los suelos, luego de tres derrotas consecutivas, juegan de visitantes y el Tomoc Chi azul, hecho por Vili y Reni: Esos bemoles acabarán con las ilusiones de miles y miles de yucatecos que aman a sus leones y no buscan fama efímera ni farolear con ellos.

Nos soy pesimista, soy realista, he disfrutado tres de las cuatro veces que se han coronado los Leones (84-2006 y 2018), por obvias razones no disfrute la del 57, y me gustaría que hoy se coronen, pero es tan difícil como que Verónica Farjat deje de traicionar a los partidos políticos o que Carlos Sáenz deje de farolear con sus selfies.

Aunque Vili dejó de farolear, el Tomoc Chi inicial que hizo ya había hecho efecto y a eso se le sumo Renán, quien busca reflectores desesperado sin entender que es un juego y que lo que menos queremos es ver a políticos de redes sociales, no políticos de a “deveras” como Víctor Cervera pacheco.