WASHINGTON, martes 29/06/21.- El calor extremo puso en alerta incluso a la Casa Blanca, que mañana debatirá cómo responder a los riesgos que representa la combinación de altísimas temperaturas y una sequía muy acentuada; la mezcla de ambos factores dispara la posibilidad de incendios devastadores, como los que arrasan desde hace semanas parte del noroeste de Estados Unidos, con una extensión más amplia incluso que la alcanzada por los “fuegos salvajes” años previos.
De acuerdo con “El País”, expertos explicaron que la subida del mercurio en Canadá se debe a la alta presión estática, dando lugar a un fenómeno conocido como “domo de calor”.
Anteayer, la localidad de Lytton, provincia de Columbia Británica, rompió el récord de la temperatura más alta registrada en Canadá.
El termómetro llegó a 46.6 grados, superando los 45 que afectaron a dos poblaciones de la provincia de Saskatchewan en 1937.
En total, 65 localidades del oeste canadiense superaron sus récords de temperatura este fin de semana.
Ayer, decenas de escuelas en Vancouver, Burnaby, Richmond y otros centros urbanos cerraron como medida preventiva, al igual que comercios y oficinas.
El Ministerio de Medio Ambiente de Canadá emitió un aviso de alerta, informando de que la ola de calor seguirá algunos días más, afectando también a la provincia de Alberta.
El ministerio indicó que se esperan temperaturas que superarán los 37o. en Edmonton y Calgary, principales ciudades de esta provincia.
Peor que en Dubái
“Hace más calor en algunas zonas del oeste de Canadá que en Dubái”, declaró David Phillips, responsable del clima en el ministerio. Medios locales indican que el consumo de energía eléctrica en Columbia Británica se ha disparado para mitigar los efectos de la canícula. Varias ciudades habilitaron centros para que las personas se protejan y refresquen.
En Estados Unidos, la Casa Blanca informó que el presidente Joe Biden se reunirá mañana miércoles con funcionarios de su gabinete, gobernadores de los estados occidentales y agentes del sector privado para analizar “la devastadora intersección de la sequía, el calor y los incendios forestales en el occidente” del país.
La reunión tiene también como objetivo incrementar y coordinar los esfuerzos de prevención y respuesta para la temporada de incendios forestales, que ya supera en número, intensidad y alcance los grandes fuegos registrados el año pasado.
Anteayer, el calor extremo, con temperaturas que superaron los 43 graos —las más altas en la historia de la ciudad desde que hay registros—, obligó a suspender pruebas clasificatorias para los Juegos Olímpicos de Tokio en Eugene, Oregón.
Portland, la ciudad más grande de Oregón, esperaba alcanzar ayer 45 grados, dos más que los registrados anteayer en su aeropuerto —la media ahí en esta época del año son 22.7 grados— y la temperatura más alta en la ciudad desde 1940.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, en sus siglas inglesas), la agencia gubernamental de salud pública, emitió avisos en su página web recordando que el calor extremo cobra cada año la vida de al menos 600 estadounidenses.
La ola de calor extremo, sumada a la persistente sequía, ha disparado el número de incendios forestales.