UMÁN, Yucatán, domingo 20/06/21.- Ridícula sanción de tres años de cárcel le impusieron al conocido vándalo Francisco Javier Uc Ku (a) “Tzorot”, que en un video presumió que arponeó y amenazó de muerte a Luis Miguel P.P, policía Municipal de Hunucmá.

Esta pena de risa, burla para la justicia y para la sociedad, la logró este delincuente sólo porque “confesó” su delito, cuando ya lo había presumido en su cuenta de Facebook, de modo que debieron seguirle el juicio y condenarlo severamente.

Con poco tino y sensatez, la juez de control de Umán, Diana Yadira Garrido Colonia, otra vez ayudó al “Tzorot” y le impuso una multa de 51 unidades de actualización, además de que sólo lo amonestó públicamente; le suspendió sus derechos políticos, y le prohibió que se acerque a la casa del policía al que hirió.

Todo esto se dio porque antes de la audiencia intermedia “Tzorot” le pagó al policía 3 mil pesos, por reparación del daño, quien lo aceptó, pues sabía que era una pérdida de tiempo buscar justicia, ya que la juez lo presionaba, como siempre hacen, para que acabe este lío legal.

“Tzorot” es conocido vándalo de Hunucmá y en un video que grabó y compartió por la red social también amenazó a otros policías y a un comunicador.

Aun así, la juez, reclasificó el delito por el cual anteriormente lo había imputado, que fue el de tentativa de homicidio calificado (ventaja) contra servidor público, por el de lesiones calificadas cometidas contra servidor público.

Luego modificó la medida cautelar que le había impuesto, que fue la de prisión preventiva oficiosa (se da porque así lo dispone el juez de la causa y se lo permite la Constitución), por la de prisión preventiva justificada, que se impone cuando se le pide, funda y motiva.

Incluso determinó que la Fiscalía no pudo acreditar el elemento subjetivo del delito, es decir, que el sujeto activo tenía la intención de privar de la vida al pasivo, pero sí se pudo demostrar que hubo una intención de causar una alteración en la salud del agraviado.

Es más, por cuanto a lo dicho por el policía, que “Tzorot” le mencionó como “hoy sí te va a cargar la verga, hoy te mueres pinche policía”, esta “juez” expuso que no se puede determinar que quería matarlo.

También dijo que “Tsorot” sólo quería lesionarlo, ya que si quisiera matarlo al momento que cayó lesionado el agraviado, el imputado se hubiera acercado y terminaría con su vida y no se hubiera retirado del lugar.

Añadió que en el lugar de los hechos no se encontraron piedras, por lo que el dicho del policía en el sentido que después de que le dispara le tiró piedras es un dato aislado, ya que no se corroboró con el informe de procesamiento que ocuparan piedras.

Por cuanto a las publicaciones de Facebook, no las tomó en consideración, pues no estuvo asistido de un defensor y no tienen valor dichas manifestaciones, y no las puede tomar como un indicio de que quería privarlo de la vida.

Estos hechos se dieron el 15 de septiembre del 2020, a las 16 horas, en la calle 27 (carretera Hunucmá-Sisal) entre 54-A y 54-B de la colonia “Santiaguito”, de Hunucmá, específicamente en el puesto de control de desinfección, ubicado enfrente de la posada “María Elena”.

Momentos antes, cuando iba a ser detenido, Francisco Javier se puso como loco cuando le aplicaron las medidas sanitarias para el control del Covid.

Por eso que intentó privar de la vida al policía tercero Luis Miguel P.P., ya que le disparó con un arpón a la altura del pecho.

Cabe señalar que este agente carecía de arma o de algún objeto para defenderse, es por lo que el oficial metió su brazo, evitando con ello una lesión mayor que le hubiera ocasionado la muerte, ya que la varilla del arpón se incrustó en esa extremidad, atravesando también su antebrazo, al grado que la punta le alcanzó la axila.