CIUDAD DE MÉXICO, miércoles 09/06/21.- Loki, uno de los personajes secundarios más interesantes del universo Marvel, es el protagonista de una esperada serie propia que se estrena hoy miércoles 9 de junio en Disney+.

Es una historia que parece una derivación futurista de la española “El ministerio del Tiempo”.

La trama parte de una escena de “Avengers: Endgame” en la que Loki (Tom Hiddleston) desaparece en un agujero del tiempo al tocar el poderoso Teseracto (ese cubo de luz azul brillante que se guarda en Asgard, el reino de Thor y Loki).

Los creadores de la serie construyen una potente historia de esas que le gustan tanto a Hollywood, mezclando todo tipo de líneas temporales.

La acción comienza en 2012, pero pasa también por 1549, 1858 o incluso por el año 79 después de Cristo, nada menos que en una Pompeya a punto de ser sepultada por la lava del Vesubio.

Múltiples escenarios para situar a Loki como un prisionero de algo llamado la Agencia de Variación Temporal, encargada de velar por la Sagrada Línea Temporal, o lo que es lo mismo, la historia tal y como se conoce -en el mundo Marvel, claro-.

Al igual que ocurre en la popular serie española, en Loki cualquier acontecimiento que no sigue esa línea temporal amenaza el equilibrio histórico y, por ende, el mundo.

Y también aquí hay personajes -conocidos como ‘variantes’- que son los responsables de que las líneas se rompan y se diversifiquen en múltiples sublíneas que en Loki pueden derivar en una “Guerra multiversal” que supondría la destrucción de todo.