MÉRIDA, Yucatán, viernes 28/05/21.- Además de celoso, José Vladimir López Alcalá, resultó ser un cobarde y, con ayuda del mal sistema de justicia, logró que lo condenen a sólo 10 años de cárcel, por intento de feminicidio, que se castiga con pena de 26 a 40 años, pues intentó matar a su esposa.
Su cobardía la mostró primero cuando, luego de atacar a su mujer y para tratar de que lo detuvieran se arrojó a un pozo, ubicado en la bodega donde intentó matar a su esposa, en la “Colonia Obrera”, en febrero de este año.
El juez de control Kenny Martins Burgos Salazar aprobó el procedimiento abreviado y la conclusión temprana de este procedimiento y la condena mínima (de 10 años y ocho meses de cárcel), con una sustancial reducción, pues por este ilícito la sanción va de los 26 a los 40 años, ya que no hubo oposición de las partes.
Le impuso también una multa de 500 unidades de medida de actualización; amonestación pública; suspensión de sus derechos políticos; negó los beneficios de sustitución de sanciones, y la reparación del daño se determinó en forma abstracta, dejando a salvo los derechos de la víctima de promover dicha reparación en ejecución de sentencia.
Al final se renunció al plazo para impugnar, quedando firme la sentencia en el acto.
El 6 de febrero de este año, José Vladimir López Alcalá (ó) José Bladimir López Alcalá trató de matar a cuchillazos a su pareja sentimental S.J.F.I., delante de su hijo, pero cuando llegó la policía, como buen cobarde, se arrojó a un pozo, de donde lo sacaron herido.
El artero ataque de este sujeto ocurrió el sábado 6 de febrero, en una bodega de la “Colonia Obrera”, a las 13:00 horas y al agresor lo imputaron el jueves 25 de febrero, por el delito de feminicidio agravado en grado de tentativa.
El juez de control Kenny Martins Burgos concedió la ampliación del termino para resolver la situación jurídica del acusado.
De acuerdo con información recabada, el sábado 6 de febrero S.J.F.I. estaba con José Vladimir y su hijo menor, de identidad reservada, en una bodega ubicada en la avenida Fuerza Aérea entre 99 y 107 de la Colonia Obrera de esta ciudad, cuando, en un momento dado empezaron a discutir y como para que se calmara la mujer, le dijo que cerrara los ojos y, acto seguido, la empezó a lesionar, diciéndole que la iba a matar y luego se suicidaría, exteriorizándole sus celos.
La lesionó varias veces en diversas partes del cuerpo y no pudo herirla de gravedad, debido a que la mujer metió las manos para defenderse.
La mujer empezó a gritar pidiendo ayuda y momentos después llegaron al lugar policías de la secretaría de seguridad Pública (SSP) y al verlos José Vladimir se arrojó a un pozo ubicado en la bodega, del cual, momentos después, lo rescataron bomberos.
Los policías lo detuvieron y lo llevaron al Hospital O’Horán para que lo curen de las heridas que sufrió al caer al pozo, entre ellas una fractura de pierna.
La mujer sufrió lesiones que por su naturaleza son de aquellas que ponen en peligro la vida, que fueron causadas de manera dolosa y por razones de género, ya que existen antecedentes de violencia de José Vladimir, además de que entre ellos existió una relación sentimental.