GINEBRA, jueves 27/05/21 (EFE y AP).— La variante hindú del Covid-19, más contagiosa que el original, ya se detectó en más de 60 países, entre ellos México, Argentina y Brasil, así como España y otras naciones de Europa Occidental, informó ayer la Organización Mundial de la Salud (OMS).

En su informe epidemiológico semanal, que en esta ocasión da amplios detalles sobre las cuatro variantes que más preocupan a los científicos (detectadas primero en Reino Unido, Brasil, Sudáfrica e India), la OMS identifica al menos tres evoluciones diferentes de la variante hindú, ya presentes en los cinco continentes.

Como en las otras tres variantes estudiadas, se observa en la hindú un incremento de la transmisión del virus, pero aún no se confirma si aumenta también el número de casos graves y hospitalizaciones, algo que sí consideran posible los científicos en el caso de las variantes británica, brasileña y sudafricana.

Es posible además que la variante hindú reduzca el nivel de inmunización del organismo tras recuperarse del Covid-19 y aumente con ello el riesgo de reinfección, algo que ya se comprobó con las variantes sudafricana y brasileña, pero que según los estudios médicos no ocurre en el caso de la británica.

Por otro lado, los estudios preliminares parecen mostrar que las vacunas siguen siendo eficaces ante la variante hindú.

En Roma, varios grupos que defienden a informantes pidieron ayer a la OMS que abra una investigación independiente sobre el caso de un investigador italiano que dijo haber recibido presiones para falsificar datos en un reporte ante la propia OMS sobre la respuesta italiana al coronavirus.

Transparencia Internacional, Whistleblowing International Network y otros 30 grupos anticorrupción y de salud pública enviaron una carta abierta a la Asamblea Mundial de la Salud. La asamblea, que es el máximo organismo de toma de decisiones en la OMS, está formado por todos los estados integrantes del organismo y se reúne esta semana.

Los firmantes pidieron a la agencia de Naciones Unidas que se comprometa a reformar su política de protección a informantes. Señalaron que el investigador italiano, doctor Francesco Zambon, sufrió represalias por reportar el incidente por medio del sistema interno de ética de la OMS. Zambon renunció en marzo y dijo que se había visto aislado y marginado después de quejarse, primero de forma interna y más tarde pública, por el escándalo.

Zambon dijo haberse visto presionado por el entonces director general asistente, el doctor Ranieri Guerra, para falsificar datos sobre los preparativos de Italia antes de la pandemia en un informe que él y otros investigadores escribieron para ayudar a otros países a prepararse cuando el Covid-19 empezó a extenderse por el mundo el año pasado.

Emails y borradores del reporte muestran que Guerra quería que el reporte dijera que Italia había “actualizado y reconfirmado” su plan de preparación ante pandemias en 2016. Zambon dice que el plan italiano era de 2006 y se negó a hacer el cambio.

El informe se publicó el 13 de mayo de 2020, pero fue retirado del sitio web al día siguiente después de que la oficina de de la OMS en Beijing señalara problemas de sensibilidad política con una línea temporal sobre el origen del virus en China. Zambon dijo haber corregido la línea y reimpreso el reporte, pero la OMS no volvió a subirlo ni distribuirlo.

La OMS ha dicho que el texto contenía imprecisiones y se publicó de forma prematura y sin obtener todas las autorizaciones. La organización afirma que no presionó a nadie y que la decisión de retirar el informe se tomó en su sede regional europea.

Guerra, por su parte, ha dicho que no participó en la decisión de retirar el documento. En una declaración oficial ante la fiscalía de Bérgamo que investiga la cifra de muertos en Italia por el COVID-19, Guerra dijo que el plan de pandemia no necesitó una actualización mientras él estuvo a cargo de prevención en el Ministerio italiano de Salud, entre 2014 y 2017.

La carta abierta afirma que al retirar el reporte italiano se privó al mundo de información vital de salud pública cuando la pandemia ganaba terreno en Europa. Italia fue el primer país occidental en sufrir un fuerte impacto del virus.

Además, indicó la carta, la supuestas represalias contra Zambon “destacan graves fallos de la política de informantes de la OMS, una pieza esencial de la buena gobernanza de cualquier institución”.

En Washington, el presidente Joe Biden anunció ayer que ordenó a los servicios de Inteligencia de Estados Unidos que le entreguen un informe sobre el origen de la pandemia del Covid-19 en un plazo de 90 días.

Biden reaccionó así a las especulaciones sobre el origen del coronavirus, después de que la teoría de que surgió en un laboratorio de Wuhan, China, ganara adeptos en los últimos días.

El anuncio de Biden se produjo después de que un informe de la Inteligencia estadounidense descubriera que varios investigadores del Instituto de Virología de Wuhan, China, se enfermaron en noviembre de 2019 y tuvieron que ser hospitalizados, como publicó “The Wall Street Journal” al inicio de esta semana.