WASHINGTON, lunes 24/05/21 (AP).— Las nuevas y más relajadas recomendaciones de las autoridades de salud en Estados Unidos sobre el uso de las mascarillas prácticamente han eclipsado otro cambio importante en la orientación del gobierno: prácticamente ya no será necesario que las personas completamente vacunadas se realicen pruebas de coronavirus.

Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) dijeron la semana pasada que aquellas personas vacunadas totalmente contra el Covid-19 y que no tengan síntomas no necesitan ser examinadas para detectar el virus, incluso si se expusieron a alguien infectado.

El cambio representa una nueva fase en la epidemia después de casi un año donde las pruebas fueron el arma principal contra el coronavirus. Las vacunas son ahora fundamentales para el combate y han reducido drásticamente las hospitalizaciones y muertes.

Casi la mitad de los estadounidenses ha recibido al menos una inyección y un 40% están completamente vacunados.

“En este punto, realmente deberíamos preguntarnos si los beneficios de las pruebas superan los costos, que son muchas interrupciones, mucha confusión y muy pocos beneficios clínicos o de salud pública”, dijo el doctor David Paltiel, de la Facultad de Salud Pública de Yale, quien defendió la realización de pruebas generalizadas en las universidades en 2020.

Si bien las personas vacunadas aún pueden contraer el virus, afrontan un riesgo bajo de enfermar de gravedad. Muchos expertos creen que ahora dar positivo a una prueba de Covid-19 causará preocupaciones e interrupciones innecesarias en el trabajo, el hogar y la escuela, así como cuarentenas y cierres.