MÉRIDA, Yucatán, sábado 03/04/21.- Nada tonto y muy tramposo, el mininarco Pablo C.G. intentó pasar como un enfermo mental para que no lo enjuicien por el delito de narcomenudeo de marihuana y de metanfetaminas, pero lo descubrieron, lo imputaron, lo vincularon y lo dejaron preso.
La juez de control Blanca Beatriz Bonilla González, en una misma audiencia, lo imputó y vinculó a proceso, y le impuso la medida cautelar de prisión preventiva justificada por todo el tiempo que dure el proceso.
En febrero, cuando lo detuvieron en un cateo a una casa de la colonia San Antonio Xluch, aparentemente estaba mal de sus facultades mentales por el exceso de drogas que había ingerido y se le pidió al Hospital Psiquiátrico que se le haga una valoración para determinar si se encontraba en estado normal y podría ser sujeto a un proceso penal.
Con el paso del tiempo, el resultado del examen le fue adverso al mininarco y ahora está preso, pues pretendía hacerse pasar como un inimputable, para evadir su responsabilidad con la ley.
Lo detuvieron el 26 de febrero, a las 21:30 horas, al ejecutarse una orden de cateo por las autoridades competentes en una casa ubicada en la colonia San Antonio Xluch, junto con otras personas, en el inmueble, en donde encontraron una caja con hierba marihuana, varias bolsas de naylon con la misma, así como tres fragmentos de sustancia sólida cristalina, al igual que restos de polvo blanco que resultó ser metanfetamina. Los policías también hallaron una báscula digital.