NUEVA YORK, jueves 01/04/21.- El gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, firmó ayer una norma que legaliza el uso recreativo de la marihuana.
Con esta iniciativa avalada por las dos cámaras, donde los demócratas de Cuomo detentan la mayoría, Nueva York se une a otros estados de Estados Unidos —más el distrito de Columbia— que ya permiten ese uso de la cannabis.
Esta legislación histórica brinda justicia a comunidades largamente marginadas, fomenta una nueva industria que hará crecer la economía y establece garantías de seguridad sustanciales para la gente”, dijo Cuomo en un comunicado.
La ley permitirá a mayores de 21 años comprar cannabis y cultivar seis plantas para su consumo personal, con un plan para que parte de los fondos recabados vayan a tratamientos contra la drogadicción y de educación.
Nueva York, además, eliminará de forma automática los antecedentes de personas condenadas anteriormente por delitos relacionados con la mariguana, que ya no estarán penados.
La ley también eliminará multas por posesión de hasta 85 gramos de la droga, el nuevo límite de posesión personal. Y un programa ya existente de uso médico de la mariguana será expandido.
La oficina del gobernador afirmó que la entrada en vigor de esta medida podría proporcionar unos 350 millones de dólares anuales en impuestos y crear al menos 60 mil puestos de trabajo.
La nueva regulación estipula un impuesto de 9% sobre las ventas de cannabis, al que habría que sumar 4% adicional a repartir entre las autoridades municipales y del condado.
El 40% de los ingresos fiscales se destinarán a las comunidades negras y latinas, cuyos miembros han sido detenidos de forma desproporcionada por cargos relacionados con la mariguana, según medios de comunicación estadunidenses.
Si bien el mercado tardará en establecerse, una publicación de la revista especializada Marijuana Business Daily muestra que Nueva York podría convertirse en el mercado más grande de la costa este, generando un potencial de dos mil 300 millones de dólares en ventas anuales para su cuarto año.
Una nueva oficina supervisará que las nuevas medidas generen el beneficio esperado.
La decisión se produce cuando Cuomo enfrenta una investigación por supuesto acoso sexual e intimidación a empleadas, así como acusaciones contra su administración de haber encubierto muertes relacionadas con la pandemia de covid-19 en residencias de ancianos.