MÉRIDA, Yucatán, lunes 15/03/21.- El sol de la tarde ilumina con todo su esplendor la Hacienda de Chenché de las Torres, cuya belleza arquitectónica que asemeja un castillo europeo enclavado en medio de la selva maya al Oriente de Yucatán, cautiva a visitantes nacionales, entre los que se encuentran cantantes, actores y productores de telenovelas.
“El primer propietario de la hacienda fue un conde francés de nombre Alvaro Peón de Regil, por eso el visitante podrá encontrar el Escudo de armas en algunas partes”, explicó don Marcial Berzúnza, quien trabaja en el lugar desde hace 33 años, “comencé como pastor, cuidando carneros”.
En entrevista exclusiva durante un recorrido por el lugar, que cuenta con calabozo, torres de 20 metros, sala, habitaciones con artículos del siglo XVIII, una capilla, piscina, casa de máquinas y extensos jardines, don Marcial comentó que al morir el conde, heredó a su hija la propiedad, “pero la vendió a don Lorenzo Manzanilla Monforte”.
“Después, don Lorenzo cedió la propiedad a su hijo Lorenzo Manzanilla Arce y éste a sus nietos, hasta hace 19 años que la compró mi patrona Isabella Kimerman, originaria de Austria, quien falleció hace unos meses”, dijo don Marcial, quien se encarga de administrar y limpiar la hacienda que habitualmente es rentada como escenario para fotos y vídeos para XV años, bodas y otras fiestas sociales.
“Ahora por la pandemia del Coronavirus casi no viene la gente, pero antes la arquitectura de Chenché de las Torres inspiró a los artistas para grabar vídeos, películas y telenovelas”, añadió, pero no supo dar el nombre de las producciones, “sólo me acuerdo de Paty Manterola y un grupo de artistas coreanos que recrearon el auge henequenero en Yucatán”.
“Hace algunos meses grabaron escenas en Chenché de las Torres, así como en otras haciendas henequeneras de Yucatán. ¿Lo bueno? es que beneficiaron a varios habitantes a quienes contrataron como extras”, reveló.
Don Marcial volvió a sus recuerdos y relató que en la casa principal de Chenché de las Torres trabajaron esclavos de origen coreano, “les pagaban con comida, por eso la hacienda tenía una tienda de raya y alrededor varias casas para ellos”.
Su mirada de pronto se dirigió hacia la capilla, “atrás hay una Virgen de la Concepción que trajeron de Europa, vaya y disfrute todo lo que hay”, dijo y se despidió para continuar limpiando los extensos jardines de Chenché de las Torres.
MARTHA LÓPEZ.-