CIUDAD DE MÉXICO, miércoles 24/02/21 (EFE).— Emma Coronel Aispuro pasó de ser una exreina de belleza rodeada de lujos y acaparar todas la miradas durante en juicio de Joaquín “El Chapo” Guzmán hace dos años a ser detenida en Estados Unidos por su supuesta implicación en el narcotráfico internacional y tras años exhibiendo una vida de lujos.

Nacida hace 31 años en California, Emma Coronel tiene la doble nacionalidad estadounidense y mexicana y muy pequeña se mudó con sus padres a La Angostura, en el norocciental estado de Sinaloa, México.

Allí, según medios locales, creció en un contexto de narcotráfico e incluso su padre, Inés Coronel Barreras, fue capturado en 2013 señalado como responsable de delitos contra la salud.

Era considerado el primer operador de “El Chapo” y se dedicaba a la producción de mariguana en la sierra de Durango, estado vecino de Sinaloa. Su tío, Ignacio “Nacho” Coronel, fue abatido en 2010 y era considerado uno de los líderes del Cartel.

Aún así, ella aseguró más tarde que no eran familia.

A la edad de 17 años, en una fiesta en el estado de Durango, Emma conoció a Joaquín Guzmán (que tenía 51) y comenzó una relación que se formalizaría en una boda nada multitudinaria cuando ella cumplió 18 años. Sin embargo, la boda nunca se confirmó públicamente.

Lo que sí se confirmó fue la paternidad de la pareja, que en 2011 tuvieron a las gemelas María Joaquina y Emaly, que nacieron en Los Ángeles, California.

La esposa del narcotraficante más buscado y célebre de México se convirtió después del matrimonio en un símbolo que retrataba a las mujeres mexicanas que se relacionan con alguien del narco y terminan, en muchas ocasiones, involucradas en los negocios ilícitos de su marido y de quienes lo rodean.

Ella, que había sido reina de la belleza en el “Festival del Café y La Guayaba”, se convirtió en una mujer opulenta que siempre portaba ropa y joyas caras. Y además, no era la esposa de cualquier narcotraficante, sino de “El Chapo”.

Entre 2018 y 2019 se celebró en Nueva York el juicio a su esposo y Emma captó la atención de quienes cubrían el caso por sus espectaculares atuendos y su presencia diaria y siempre contundente. Incluso algunos medios la bautizaron como “la Kardashian mexicana”.

“Yo pienso que es lo que haría cualquier esposa en mi lugar, estar con su esposo en momentos difíciles. Para que me vea presente y sienta mi apoyo”, declaró en diciembre 2018 en entrevista a un medio estadounidense.

“El Chapo” fue declarado culpable de narcotráfico por un jurado en Nueva York en 2019 y ahora cumple cadena perpetua en una prisión de máxima seguridad del país.

Después de concluir el juicio, Emma Coronel publicó en redes sociales una emotiva carta en la que reiteraba su amor por Guzmán. “Siempre contará conmigo”, dijo.

“Hablo de años de convivir con él. No me pueden vender otra versión de Joaquín y aunque hace mucho tiempo que no tenemos contacto, mi esposo sabe lo mucho que lo quiero”, indicó entonces.

Tras concluir el juicio y ya con las miradas atentas de la prensa y la opinión pública, Emma fue convirtiéndose en “influencer” en Instagram.

Aparecía esquiando e incluso se llegó a filtrar una impresionante fiesta de cumpleaños de sus hijas inspirada en la muñeca Barbie hace unos años.

Además, aumentó su fama con la participación en noviembre de 2019 en el reality show “Cartel Crew”, una producción que retrata la vida de familiares de personas relacionadas con el crimen organizado. “Somos normales, yo me considero una mujer normal, y me pasa mucho que las personas me juzgan sin conocerme”, dijo.