WUHAN, martes 09/02/21.- El equipo internacional de expertos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) que estuvo en China durante el último mes para establecer los orígenes de la pandemia de COVID-19 brindó una conferencia de prensa en Wuhan este martes y aseguró que aún no ha sido identificada ninguna fuente animal del coronavirus.

Peter Ben Embarek, especialista en seguridad alimentaria y enfermedades animales de la OMS y presidente del equipo de investigación, dijo que el foco del estudio era saber si la enfermedad de COVID-19 tenía una “historia previa” y si estaba circulando antes de diciembre de 2019.

Al respecto, afirmó que el equipo no encontró evidencia de grandes brotes que pudieran estar relacionados con el coronavirus antes de diciembre de 2019 en Wuhan o en otro lugar, y que tampoco se halló una circulación más amplia fuera del grupo de mercado de Huanan.

El científico danés indicó que la investigación descubrió nueva información, pero que no modificó drásticamente la imagen del brote de COVID-19.

Ben Embarek precisó que trabajo para identificar el origen del coronavirus continúa apuntando hacia un reservorio natural en los murciélagos, pero que es poco probable que estuvieran en Wuhan.

La investigación sobre cómo se introdujo el virus todavía es un “trabajo en progreso”, aseguró.

Según el director de programas de la OMS que se especializa en seguridad alimentaria y zoonosis, la vía más probable del coronavirus fue el cruce en humanos de una especie intermedia, y que la hipótesis de que se transmite a través del comercio de productos congelados de la cadena de frío también es posible.

Asimismo, descartó la hipótesis de la fuga del virus de un laboratorio y no la contemplarán como parte de su trabajo para estudiar los orígenes de la enfermedad.

Además, recomendó el análisis de nuevos materiales, incluidas muestras de bancos de sangre, que podrían ayudar a identificar casos anteriores en China.

En la misma línea que Ben Embarek, Liang Wannian, jefe del panel de expertos COVID-19 de la Comisión Nacional de Salud de China, aseguró que el descubrimiento del virus sugiere que el SARS-CoV-2 pudo haberse originado por transmisión zoonótica, pero aún no se ha identificado un huésped animal.

Los murciélagos y los pangolines son candidatos potenciales para la transmisión, pero las muestras de coronavirus encontradas en esas especies no son idénticas al SARS-CoV-2, agregó.

Asimismo, señaló que la alta susceptibilidad de los visones y gatos al coronavirus podría indicar que otros animales sirvan como reservorios, pero la investigación es insuficiente.

En lo que respecta a cuándo y dónde se originó la pandemia, el profesor Liang dijo que podría haber existido una circulación no informada de coronavirus en otras regiones antes de Wuhan, al tiempo que aseguró no se detectó una circulación sustancial de COVID-19 en la capital de la provincia de Hubei antes del brote de diciembre de 2019.

“No hay indicios de la propagación del SARS-CoV-2 en la población antes de diciembre de 2019 y no hay pruebas suficientes para determinar si se había propagado en Wuhan antes de diciembre de 2019″, manifestó.

Agregó que el mercado de Huanan en Wuhan fue uno de los lugares donde estalló la pandemia, pero la transmisión también tenía lugar en otras partes al mismo tiempo.

Liang reveló que con la evidencia vigente aún no es posible determinar cómo se introdujo el coronavirus en el mercado de mariscos de Huanan. Si bien algunos de los primeros casos estaban asociados con ese mercado, algunos lo estaban con otros y también sin ningún mercado.

Las muestras presentaron una contaminación generalizada de SARS-CoV-2 en las superficies del mercado de Huanan, pero el muestreo de vida silvestre en China hasta ahora no ha logrado identificar la presencia del virus, detalló.

Liang dijo que el muestreo de cuevas de murciélagos en Wuhan y de otros sitios de animales hasta ahora no han logrado identificar la presencia del virus que causa la enfermedad de COVID-19, y que se necesita más investigación para determinar el papel que juegan los productos de la cadena de frío en la transmisión.

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