MÉRIDA, Yucatán, miércoles 30/12/20.- Fabiola García y Javier Herrera Aussín se llevan lo peor de 2020, un año marcado por miles de muertes a causa del Covid-19, en el que además funcionarios, empresarios y políticos mostraron rapacidad al pedir un apoyo que no necesitaban.   

Este 2020 es un año para olvidar, porque dejó muchas cosas malas, como pérdida de empleos, economía familiar dañada, pero mostró también el alto grado de irresponsabilidad social, ante la pandemia porque la gente no se cuida y no cuida a los demás, ya que prefiere pasear, comprar y divertirse a costa de la salud.

El gobierno del estado convirtió a la ley seca en algo banal y vulgar al imponerla sin ton ni son, por cualquier motivo, lo que le granjeó animosidad e hizo de la venta clandestina de licor un jugoso negocio de vividores.

Este 2020 fue un año de cosas escandalosas, como el doble homicidio en Panabá, por un trío amoroso descubierto por Gumersindo, un marido celoso, quien mató a Librado, quien tenía un amorío con la mujer de Gumersindo, y a Rossana, amante de Librado; también fue de casos impactantes como la muerte de Armado Manzanero, a causa del Covid-19, y de otros, mucho menos importantes, pero si conocidos yucatecos como el famoso Alfonso “Mosco” Pereira Palomo, empresario que apoyó a la educación, y Miguel “Negro” Gutiérrez Machado, un panista ampliamente conocido y popular.

También fallecieron el juez Luis Edwín Mugarte Guerrero, especialista” en casos difíciles, los alcaldes de Samahil y de Maxcanú, Rigoberto Tun Salas y Marlene Catzín Cih, respectivamente; también murió el director de Gobernación de la Comuna meridana Gerardo Acevedo Macari.

Lo peor del año se lo lleva Fabiola García, pues convirtió el Instituto de la Mujer en un botín y para ello se coludió con Adelaida Salas, de modo que a las mujeres víctimas de violencia la trabajadora de la Comuna las manda a un despacho que atiende la segunda, en vez de darles apoyo gratuito.

“En vez de apoyar gratuitamente a las mujeres maltratadas, Fabiola las envía a un despacho de asesoría que tiene Adelaida, al que le pagan $60 mil al mes”, afirmó nuestra fuente.

A su vez, Herrera Aussín coludido con Carlos Sáenz castillo “director” del IDEY, hicieron fraude al postular de último minuto, cuando ya la convocatoria se había cerrado, a Luis Ibarra Chami como candidato al Premio Estatal dl Deporte, al que luego en contubernio con cronistas y dos empleados de De Peso y del Por Esto lo designaron ganador, en una ilegalidad mayúscula.

Aunque el ajedrecista no se tuvo la culpa de su extemporáneo nombramiento, si tuviera ética no hubiera aceptado el premio.

La rapacidad de mucha gente salió a relucir cuando el gobierno anunció apoyo de poco más de cinco mil pesos para personas que perdieron su empleo a causa del cierre de negocios no esenciales, por el Covid-19, y se alistaron los ex alcaldes de Dzilam de Bravo y de Sinanché, Pedro Cstillo y Noé Palma, respectivamente; el hermanito de la ex alcaldesa meridana Angélica Araujo Lara, de nombre Jorge, quien es dueño de una marisquería se inscribió en el Seguro de Desempleo.

Apareció también José Miguel Bobadilla Verde, presidente del PRI de Dzilam González y quien además labora en la Comuna que preside el alcalde tricolor Cristián Carrillo Baeza.

En la lista de los llamados “Despreciables”, aparecieron  desde Miss Earth México, la progreseña Paola Aguilar Concha, hasta la consuegra del alcalde de Sinanché, Felipe Rojas Escalante, pasando por empresarios, funcionarios y políticos.

El 2020 fue un año para olvidar, y esta vez la tradicional y famosa canción “yo no olvido al año viejo” queda fuera de lugar; esperemos que el 2021 nos depare cosas mucho mejores, en especial que la gente se vuelva responsable, que se cuide y cuide a los demás.

Esperemos un FELIZ AÑO NUEVO 2021.