CIUDAD DE MÉXICO, lunes 28/12/20 (EFE).— México retomó ayer su plan de vacunación al suministrar en un recinto militar de la capital 3,900 nuevas dosis del compuesto de Pfizer-BioNTech a personal sanitario proveniente de varios hospitales del país que atienden a enfermos de Covid-19.
Los trabajadores sanitarios, tanto de hospitales civiles como militares, fueron vacunados en 20 módulos situados en el 81er. Batallón de Infantería del Heroico Colegio Militar, en el sur de Ciudad de México, pues el Ejército se encarga de la logística del transporte y cuidado de la vacuna.
“Es una experiencia muy bonita. Sí veníamos con algo de temor, pero bendito Dios ya estamos preparados para combatir la guerra contra el Covid”, dijo a EFE tras ser vacunada Lidia Estela Carrillo, subjefa de enfermería de un hospital de Ciudad Juárez, Chihuahua.
Lidia, quien llegó a la capital junto a otros compañeros para apoyar en los saturados hospitales de Ciudad de México, se contagió del nuevo coronavirus en junio y estuvo “al borde de la muerte”, por ello, al ser vacunada sintió “paz, tranquilidad y una relajación muy fuerte”, en lugar de dolor.
El sábado México recibió su segundo cargamento de vacunas con 42,900 dosis de Pfizer, 34,125 de las cuales fueron a parar a Ciudad de México, la más golpeada por el coronavirus, y 8,775 a Monterrey, Nuevo León.
Las de Ciudad de México comenzaron a aplicarse ayer domingo en el Colegio Militar, mientras que las de Monterrey fueron trasladadas a Coahuila, donde hoy lunes se dará el disparo de salida a la campaña de vacunación en el norte del país.
“(Tengo) un poco de nervios por el hecho de ser algo nuevo, una vacuna que tiene poco y somos los primeros en ser vacunados. Pero lo tomamos como un privilegio para gozar de nuestra salud y retomar nuestras actividades”, expresó Gonzalo Martínez, médico del Ejército, tras ser vacunado.
La inyección le dolió “un poco, como cualquier otra vacuna”, y tiene que estar atento en las próximas horas por si se presentan algunos síntomas como fiebre o dolor muscular. Además, en menos de un mes, será llamado para aplicarse la segunda dosis que requiere la vacuna de Pfizer.
México se convirtió el pasado jueves en el primer país latinoamericano en suministrar la vacuna de Pfizer, pocos minutos antes que Chile y Costa Rica, y la enfermera María Irene Ramírez, de 59 años, fue la primera vacunada en el país, que acumula 1.4 millones de contagios y 122,000 muertos.
Ese día se aplicaron las primeras 3,000 vacunas en el Hospital General de Ciudad de México y en recintos militares de las cercanas Querétaro y Toluca.
La oposición ha criticado que son pocos los fármacos que han llegado y algunos gobernadores se han quejado de que la vacuna todavía no llegue a sus estados, a lo que el gobierno federal responde que todavía se trata de una fase inicial para “calibrar” la logística de la vacuna.
El plan del gobierno federal es recibir, para finales de enero, 1.4 millones de vacunas de Pfizer para a todo sus trabajadores sanitarios.
Una vez vacunados, se quiere inmunizar al resto de la población, de 130 millones de habitantes, entre febrero de 2021 y marzo de 2022 de forma gratuita y gradual, según edades y enfermedades crónicas.