CIUDAD DE MÉXICO, domingo 13/12/20 (El Universal).— A la espera del resultado de este mes, 2020 se perfila como el año que romperá la tendencia de aumentos en precios de gasolinas y diesel, con la primera baja en sus cotizaciones desde que se liberó el mercado en 2017.
De acuerdo con información oficial del cierre de noviembre de la Comisión Reguladora de Energía (CRE), encargada de hacer el seguimiento de los precios de combustibles, así como también de la plataforma PetroIntelligence, entre el 1 de enero y el 30 de noviembre, el precio de la gasolina regular o Magna, la de mayor consumo en el país, se redujo 1.80 pesos por litro, mientras que la Premium tuvo una reducción de 2.48 pesos por litro y el diesel bajó 2.48 pesos. La caída de la demanda por efectos de la pandemia y la baja de los precios internacionales del petróleo contribuyeron a ese comportamiento.
Los datos de precios en el mercado nacional al 10 de diciembre, proporcionados por PetroIntelligence, permiten proyectar que no habrá cambios significativos en diciembre que puedan revertir la tendencia de todo el año. Enero arrancó con un precio de la gasolina regular de 19.72 pesos por litro; para noviembre costaba 17.72 pesos, ogual a una reducción de 9.2%. El viernes el precio de ese combustible era de 17.76 pesos.
En el caso de la Premium, utilizado por vehículos de modelo reciente, su cotización bajó de 20.83 pesos a 18.35 pesos en el mismo periodo, una disminución de 11.90%. En el caso del diesel, el precio disminuyó 11.65%, al pasar de 21.28 pesos a 18.80 pesos por litro en ese mismo lapso. Esta tendencia es contraria a la que se observó en los primeros tres años desde que se liberaron los precios, por la reforma energética.
Según analistas del sector, durante el año se presentaron eventos internacionales que afectaron el comportamiento de los precios de los petrolíferos.
A principios de marzo se suscitó la llamada guerra de precios del petróleo entre Rusia y Arabia Saudita, que hundió el valor del barril y a los mercados de valores del mundo. Este problema se combinó con la pandemia de Covid-19, que hundió a la economía mundial en la peor recesión desde la Segunda Guerra Mundial. A raíz de las graves distorsiones a la oferta y la demanda internas, el comercio, así como las finanzas, la actividad económica de las naciones sufrió graves contracciones.