MÉRIDA, Yucatán, sábado 31/10/20.- Por fin pusieron en su lugar a unos 30 vivales que invaden terrenos y luego de que se los dan por la autoridad los venden, pero esta vez se toparon con un dueño que los puso en su lugar.

Hoy en la madrugada con maquinaria pesada el dueño del terreno destruyó las endebles casas, hechas de maderas, cartón y láminas de zinc, ubicadas en  la calle 75ª con 16 del fraccionamiento “Roble Alborada”.

Liderados por un grupo de “invasores profesionales” que han hecho su modus vivendi de invadir terrenos y luego venderlos, unas 30 personas invadieron terrenos de la agrupación civil “Alborada”, que sin tentarse el corazón los sacó, como hizo en marzo de este año a otro grupo de invasores.

En marzo Mariana M.T.C. Norma Y.G.Ch., Víctor J.V.G., Hugo A.J.L., Jorge A.C.Ch. y José R.C.C. invadieron un terreno ajeno, de modo que los sacaron, los denunciaron y un juez los imputó por el delito de despojo de cosa inmueble.

Los arriba mencionados son parte de un grupo de “paracaidistas” que se asentaron en un terreno de la comunidad salesiana y que fueron desalojados por medio de la fuerza pública, de manera violenta.

Fueron denunciados por Alejandra N.L. en su carácter de apoderada legal de la persona moral “Fundación Alborada, Asociación Civil”.

Estas personas, junto con otros sujetos, el sábado 1 de marzo, entre las 16 y las 19 horas, de manera furtiva entraron y ocuparon un bien inmueble ubicado en la calle 16 entre 69 y 71 del fraccionamiento Roble Alborada, propiedad de la asociación civil antes mencionada.

Las personas, en compañía de otras, causaron diversos daños a la barda que delimita todo el terreno. Cuando los policías de la Secretaría de Seguridad Pública llegaron al terreno, estas personas ya ocupaban ilegalmente el inmueble en cuestión, por lo que fueron retiradas de manera violenta.

Esta vez maquinaria pesada destruyó sus endebles viviendas y aunque se niega a desalojar la policía no va a impedir que les destruyas esas casas, porque el terreno tiene dueño y ellos invadieron ilegalmente.