MÉRIDA, Yucatán,  miércoles 22/07/20.- Las urracas defensoras, por beneficio, de la mal llamada y peor fundamentada paridad de género no dijeron nada cuando el Cabildo de Samahil, con una “unidad” de a $35 mil por regidor designaron alcaldesa sustituta a la síndico, cuando el lugar era para un hombre, porque había alcalde.

Cuando murió la alcaldesa de Kantunil, la polémica Raymunda Che Pech, y el Cabildo designó a Santos Javier Cárdenas Poot como alcalde, las urracas rasgaron su vestiduras, se vistieron de sayal, alzaron el grito al cielo y demás actos de contricción  por tremenda herejía.

Pero ahora que el domingo anterior el Cabildo de Samahil designó a la síndico María Marbella Dzul Castillo como alcalde sustituta en lugar de Rigoberto Tun Salas, nadie dijo NADA. Si tocan el lugar de una mujer en la política está MUY mal, pero si se lo hacen a un hombre está más que bien. Imagínense la clase de justicia que tienen estas urracas.

El alcalde de Samahil, emanado del PRD, murió la semana anterior de Covid-19 en el Hospital el Faro y su familia o la Comuna pagaron $300 mil por el tiempo que estuvo internado y designaron a la síndico porque la esposa del finado ASÍ lo quiso “por ser el último deseo del alcalde”.

Ninguno de los diputados defensores de la idiotez llamada paridad de género, que es anticonstitucional y antidemocrática, invento de diputados idiotas, alzó la voz para decirle al Cabildo de Samahil que el lugar era para un hombre.