MÉRIDA, Yucatán, jueves 26/03/20.- Presos del Centro de Reinserción Social (Cereso) fabricarán 1,500 cubrebocas al día, para ayudar en la contingencia por el coronavirus Covid-19, para lo cual utilizarán 35 máquinas de coser.

Esta tarea la realizan los presos por indicaciones del gobernador Mauricio Vila Dosal, ante la escasez de este artículo, debido a la contingencia.

A los presos les dieron el material necesario, como rollos de tela de algodón y elástico comercial, para que las personas que trabajan en la maquiladora ubicada en el CERESO comiencen a fabricar este artículo, que alcanzó precios muy por arriba de su valor común y los establecimientos dedicados a su comercialización han reportado desabasto.

La Subsecretaría de Prevención y Reinserción Social informó que, con la tela entregada, que cumple con las especificaciones que se requieren para el área médica y de la salud, los internos del penal meridano calculan confeccionar 1,500 piezas por día.

Apenas recibieron los rollos de tela comenzaron con el corte de la misma y de inmediato comenzaron con la elaboración de las mascarillas quirúrgicas, que son básicas para proteger al personal médico y a los pacientes durante los procesos de atención a la salud.

Cada cubreboca pasará por un proceso de esterilización, para después poder ser usados por el personal médico del estado.

Además, el Gobierno del Estado trabaja en coordinación con la delegación Yucatán de la Cámara Nacional de la Industria del Vestido (Canaive) para que productores textiles de diferentes municipios del estado se sumen a la tarea de confeccionar cubrebocas que cumplan con los requisitos para el área médica y de la salud, lo que también ayudará económicamente a quienes han dejado de percibir por la baja de venta de guayaberas y ropas típicas.

Esta labor conjunta es resultado de la plática que tuvo Vila Dosal con el presidente local de la Canaive, Fernando Muñoz Carrillo, durante un encuentro con los integrantes del Consejo Coordinador Empresarial (CCE) en el estado, en donde se mencionó que ésta representaría una oportunidad para quienes se dedican a esta actividad.

Con esto, los pequeños talleres, la mayoría de ellos familiares, del interior del estado que están afiliados a esta Cámara podrán tener una fuente de ingreso en este tiempo de emergencia sanitaria, lo que representará beneficios para su economía, sobre todo en estos momentos en los que la actividad textil se encuentra suspendida.